Buenos días a todos. Bienvenidos a España a Madrid y ¡Es ilusionante! Créanme, me presento ante ustedes con la admiración y el respeto por lo que representa, Mundo Universitario. Muchas gracias por sus intervenciones. Es un placer acompañarles en este encuentro.
Sabemos que la cooperación, en todos los ámbitos, es más necesaria que nunca. La naturaleza global e interconectada de los desafíos y de las oportunidades lo evidencia. En el campo de la Ed.Superior sucede lo mismo. Un enfoque colaborativo permite que se compartan recursos y experiencias, que se fomente la innovación, se favorezca la movilidad —de estudiantes, profesores e investigadores— y se mejore, en definitiva, la calidad de la educación.
Este encuentro que hoy se celebra es un buen ejemplo del progreso que se ha hecho en el Espacio Iberoamericano del Conocimiento; es el resultado de años de esfuerzo y de trabajo en común.
La cooperación académica en este espacio no ha sido una creación de las Cumbres, aunque la Ed.Superior, la Ciencia y la Tecnología sí han sido prioridades desde la 1ª Conferencia Iberoamericana de 1991.
La colaboración es tan antigua como la propia historia de nuestras universidades, a uno y otro lado del Atlántico, al igual que son previos algunos de los principales mecanismos, como el Prog. IbAm de Ciencia y Tecnología para el Desarrollo (CYTED), que celebra este 2024 su 40º aniversario.
"...Os animo a seguir uniendo esfuerzos para lograr un espacio de excelencia en el que la Educación Superior sea un lugar de encuentro indispensable —uno más— de la cooperación. Iberoamericana..."
La constitución en 2002 del Consejo Universitario Iberoamericano (CUIB), en Cartagena de Indias, fue un impulso para la cooperación, al establecer por 1ª vez un ámbito de encuentro, diálogo y concertación entre las Conferencias, Consejos de Rectores, asociaciones universitarias nacionales de los 22 países iberoamericanos, junto con las principales redes de universitarias de la región.
La construcción de un Espacio Iberoamericano del Conocimiento fue un objetivo respaldado por la Cumbre Iberoamericana de Salamanca, en 2005, en la que los JdEst y de Gob encomendaron al CUIB y a la SEGIB que trabajaran en la necesaria concertación político-técnica para ponerlo en marcha. La Declaración de Salamanca recoge dicho objetivo, articulado en torno a los ejes de la investigación, el desarrollo y la innovación.
Han pasado ya casi 20 años desde aquel momento. La importante labor realizada desde entonces merece nuestro profundo agradecimiento, ya que no habría sido posible sin el apoyo comprometido de las instituciones hoy representadas en este Encuentro. Tenemos ocasión de comprobar esa labor en cada Cumbre Iberoamericana, donde los resultados obtenidos y los acuerdos alcanzados son la mejor muestra de un avance en el que se debe perseverar.
Permítanme reafirmar lo que muchos han expresado sobre el papel de las universidades, más allá de la educación en términos académicos y profesionales, debe alcanzar también otras cuestiones fundamentales para la vida democrática, como recordaba la Presidenta CRUE, como el diseño de políticas públicas y de herramientas que faciliten la toma de decisiones basadas en la evidencia científica o la promoción de una cultura de paz y del respeto de los derechos humanos. Deben promover una preparación de los estudiantes para procurar que sean ciudadanos responsables, éticos y comprometidos con la sociedad. Las instituciones universitarias han dado buena prueba de su compromiso con todo ello a lo largo del tiempo.
Permitidme que os felicite por vuestro trabajo comprometido en la consolidación de esta doble función de las universidades en nuestro espacio compartido de vínculos históricos y culturales comunes. Creo que todos aquí compartimos que las universidades de la región deben aprovechar el potencial que ofrece esta enorme fortaleza competitiva; deben seguir avanzando en la profundización del Espacio Iberoamericano del Conocimiento.
Os animo a seguir uniendo esfuerzos para lograr un espacio de excelencia en el que la Ed.Superior sea un lugar de encuentro indispensable —uno más— de la coop. iberoamericana.
Muchas gracias.