su llegada a la Base Aérea de Armilla, Don Felipe fue recibido por el Jefe de Estado Mayor del Ejército del Aire, General del Aire, Javier Salto Martínez-Avial; el General Jefe del Mando Aéreo General, General de División, José Alfonso Otero Goyanes; el General Director de Enseñanza, General de División, Enrique Jesús Biosca Vázquez y el Coronel Jefe del Ala 78, Coronel Luis García-Almenta López-Muñiz.
Tras los saludos protocolarios, Su Majestad el Rey recibió los honores de ordenanza y a continuación pasó revista a la Escuadrilla que le rindió honores acompañado por el Jefe de Estado Mayor del Ejército del Aire y el Capitán de la Escuadrilla.
Posteriormente, Don Felipe saludó colectivamente a la formación de oficiales, suboficiales, tropa y personal civil y a continuación se dirigió a la Jefatura de Estudios donde asistió a un briefing sobre el Ala 78.
Una vez finalizada la exposición sobre el Ala 78, Don Felipe realizó un recorrido por las instalaciones, en las que visitó el aula taller de mecánicos, la sala briefing de alumnos, el Simulador del HE-24 (helicóptero Sikorsky S-76) y el Simulador del HE-25 (helicóptero EC-120 Colibrí). En este último simulador Don Felipe realizó un vuelo acompañado por el Jefe del Ala 78.
A continuación, Don Felipe se trasladó al hangar del Grupo de Material donde visitó la exposición estática HE-24 (helicóptero Sikorsky S-76) con personal y equipo SAR, los equipos de revisión, así como el taller de motores.
A continuación, visitó la exposición de HE-25 (helicóptero EC-120 Colibrí) que se encuentra en las inmediaciones de la Torre de Control, atendida por componentes de la patrulla ASPA. Tras la fotografía con los componentes de la patrulla, Su Majestad el Rey se dirigió a la Torre de Control donde firmó el Libro de Visita en el despacho de Jefatura.
Para finalizar la visita, Don Felipe se trasladó a la Sala Histórica donde realizó un recorrido de la exposición.
Finalmente, Su Majestad el Rey se dirigió al Edificio Central, donde recibió el saludo de las autoridades civiles y militares asistentes al acto, dando así por finalizada su visita al Ala 78.
La Base Aérea de Armilla es, junto con el Aeródromo Militar de Cuatro Vientos, uno de los aeródromos más antiguos de España.
En el año 1980 comienza su actual etapa al crearse el “Ala de Enseñanza número 78”, asumiendo las misiones asignadas hasta ese momento a la Escuela de Helicópteros del Ejército del Aire, basada en el Aeródromo Militar de Cuatro Vientos (Madrid) desde 1960. El material de vuelo en aquellos era el Z-2 (AC-12) "Pepo", en el que se efectuaron unas 2500 h. de vuelo y el Z-1 (Sikorsky S-55), que acumuló tan sólo unas 1500 h. antes de ser dado de baja. Ambos fueron sustituidos por los Bell-47, UH-1H y Hughes 300 C antes del traslado a Armilla.
En la actualidad, la Base es la transformación conservadora del viejo aeródromo. Destaca su Plaza de Armas, bello patio enmarcado por un conjunto de edificios seudo árabes de la época antigua y cerrado por un moderno monumento a los que dieron su vida por España, rematado por una figura de un avión de papel en actitud ascendente, como queriendo simbolizar a un tiempo la fragilidad del vuelo y el estudio necesario para el mismo.