os Reyes llegaron al Palacio Real de Madrid y acompañados por el presidente del Gobierno, Pedro Sánchez Pérez-Castejón, y por el ministro de Asuntos Exteriores, Unión Europea y Cooperación, José Manuel Albares, accedieron a la Saleta de Gasparini y ocuparon su lugar y se produjno el saludo al Cuerpo Diplomático acreditado en España.
Finalizado el saludo, Sus Majestades los Reyes se dirijieron al Solón del Trono y el acto comenzó con la intervención de monseñor Bernardito Cleopas Auza, nuncio de Su Santidad el Papa.
El Rey en su intervención destacó que "...gran parte de la atención global ha permanecido en 2021 centrada en la lucha contra la pandemia que sufrimos desde hace cerca de dos años. Sin embargo, los retos globales a los que se venía enfrentando la Comunidad Internacional con anterioridad a la pandemia permanecen, y su respuesta a los mismos debe continuar con vigor. En esta exigente labor ustedes encontrarán en España a un miembro constructivo de la sociedad internacional y a un socio dispuesto, que apuesta por el multilateralismo y comprometido con el respeto al Derecho internacional..."
La recepción concluyó con un encuentro de Don Felipe y Doña Letizia con los asistentes.
Acompañaron a Sus Majestades los Reyes, la secretaria de Estado de Asuntos Exteriores y Globales, Ángeles Moreno; el secretario de Estado para la Unión Europea, Pascual Ignacio Navarro; la secretaria de Estado de Cooperación Internacional, Pilar Cancela; el director del Instituto Cervantes, Luis García Montero; la directora de la Oficina de Coordinación para la Presidencia Española de la Unión Europea, María Aurora Mejía; el subsecretario del Ministerio de Asuntos Exteriores, Unión Europea y Cooperación, Luis Manuel Cuesta; el director de la Agencia Española de Cooperación Internacional para el Desarrollo, Antón Leis; e invitados.
El Diplomático es el funcionario público experto en relaciones internacionales con vistas a ser acreditados ante otros Estados y también en Organismos Internacionales con carácter representativo.
Los Estados organizan su diplomacia de diversas formas, según sus tradiciones administrativas o su concepto de cómo ha de ser la conducción de los asuntos exteriores. En el Reino España, siguiendo la tradición latina, la profesión diplomática se estructura en torno a un cuerpo general -la Carrera Diplomática- que pertenece al Ministerio de Asuntos Exteriores, Unión Europea y Cooperación, y utiliza en el extranjero funcionarios de otros cuerpos pertenecientes a aquellos Ministerios (Defensa, Cultura, Comercio, etc.) que por sus actividades poseen un sector exterior.
En España, el acceso a la Carrera Diplomática se realiza mediante oposición, como ocurre con cualquier otro escalafón de la función pública estatal. Sus miembros se rigen por las disposiciones que regulan la función pública, sin más peculiaridades que las requeridas por la naturaleza de sus funciones.