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uchas gracias por tan cordial acogida y amables palabras y, sobre todo, por la oportunidad de dirigirme a todos ustedes en la sesión inaugural de la Conferencia Anual del Club de Madrid.
Una prestigiosa organización independiente, concebida como foro de reflexión al servicio del fortalecimiento del liderazgo y de los valores democráticos en el mundo, que merece el reconocimiento y la gratitud de todos.
Un reconocimiento que deseo manifestar a su actual Presidente, Don Ricardo Lagos, y a su Vicepresidenta, la Señora Mary Robinson, así como a los distinguidos antiguos Jefes de Estado y de Gobierno y Altos Directivos de Organizaciones Internacionales que integran el Club de Madrid.
Esta Conferencia Anual, que se celebra de nuevo en España, alienta el diálogo sereno y la reflexión con perspectiva de futuro, sobre los grandes retos de nuestro tiempo.
Bajo el sugerente tema de "Las Dimensiones Políticas de la Crisis Económica Mundial", esta reunión busca enriquecer los debates y análisis en curso, no sólo para dar respuesta a los porqués de la crisis, sino para colaborar en la definición de medidas y reformas que mitiguen sus dolorosas consecuencias sociales y eviten su repetición.
Se trata de una tarea para la que esta Conferencia del Club de Madrid se encuentra particularmente bien cualificada y pertrechada.
No sólo agrupa a muy distinguidos líderes de todo el mundo con profunda y valiosa experiencia de gobierno, sino que reúne a muy destacados académicos y expertos en los principales campos y disciplinas involucrados en la salida de una crisis económica de dimensión internacional.
Es decir, un conjunto de personalidades capaces de aportar interesantes yútiles reflexiones desde la insustituible experiencia del ejercicio del poder, potenciada por el saber científico y técnico.
De ahí que esta reunión me permita recordar el acierto de la creación hace tan sólo ocho años de este Club, que ha logrado consolidarse como prestigiosa y dinámica institución.
Ocho años desde aquella Conferencia organizada por la "Fundación para la Relaciones Internacionales y el Diálogo Exterior" y la "Fundación Gorbachov de Norteamérica", que reunió en Madrid a una treintena de Jefes y ex Jefes de Estado y de Gobierno.
Con ellos participó cerca de un centenar de políticos, académicos, y expertos en transiciones democráticas.
De aquel encuentro surgió el Club de Madrid cuyos miembros han volcado desde entonces sus conocimientos, experiencia política y prestigio, tanto al servicio de la democracia y sus valores, como de la promoción del liderazgo democrático.
Bajo la decidida dirección, de los Señores Fernando Henrique Cardoso, primero, y Ricardo Lagos, después, los más de setenta miembros del Club de Madrid, procedentes de más de cincuenta países, han abordado los principales retos de cada momento.
Y lo han hecho desde planteamientos que permiten fortalecer la cultura democrática, mediante ideas y recomendaciones para que la comunidad internacional pueda superar con seguridad y confianza los desafíos planteados.
Estadistas y expertos han reflexionado conjuntamente sobre graves problemas como el terrorismo, la pobreza, la inclusión y la cohesión social, los flujos migratorios, los retos energéticos o el cambio climático.
En esta Conferencia el Club de Madrid va a estudiar y a buscar respuestas a la dimensión política de la crisis económica internacional, muy grave y compleja, que preocupa por sus efectos económicos y por sus dolorosas consecuencias sociales.
Contando con la aportación de las mesas regionales ya celebradas, los temas en discusión abarcan desde la gobernanza mundial, el empleo, el bienestar social, los derechos y deberes democráticos, hasta el Estado, el ciudadano, el mercado o los marcos reguladores.
Se trata de importantes retos que, como es evidente, requieren respuestas a nivel nacional, regional y global.
Todo un elenco de asuntos sobre los que los responsables políticos de hoy pueden contar con la experiencia conjunta de aquellos que ya han vivido y gestionado otras crisis económicas y sociales, y aportar hoy su visión en la búsqueda de soluciones.
Unas soluciones centradas en corregir desajustes, recuperar el empleo, la plena actividad productiva, y dotar de mayor seguridad y confianza a operadores, trabajadores y consumidores, así como el mayor bienestar de los ciudadanos, con el concurso de las fuerzas políticas, económicas y sociales.
Para ello se requieren instituciones y reglas internacionales sólidas y eficaces, dirigidas a lograr el buen funcionamiento económico y social en un entorno globalizado.
Con motivo de la "Conferencia sobre la Transición y Consolidación Democrática" de 2001 sostuve que "La democracia es elúnico sistema político digno de la especie humana".
Estoy también persuadido de que el buen funcionamiento del sistema democrático es asimismo esencial para abordar y superar las dificultades de esta crisis, y elúnico sistema que permitirá a nuestras sociedades salir más fortalecidas de ella.
La democracia es primordial para la paz, la libertad, el progreso y el respeto de los derechos humanos a escala universal. Un objetivo por el que tenemos que luchar día a día. Y esa lucha está en el centro de la razón de ser del Club de Madrid.
En consecuencia, siempre he alentado los trabajos de esta organización, nacida para contribuir con sus mejores esfuerzos a la construcción de una sociedad más libre, más justa y más igualitaria.
Antes de concluir quiero dedicar un emocionado recuerdo a la memoria de Don Leopoldo Calvo Sotelo y Don Raúl Alfonsín, dos destacados defensores de la democracia e ilustres miembros del Club de Madrid, que nos han dejado recientemente.
Al mismo tiempo, damos la más cordial bienvenida a cuantas personalidades se han incorporado a este Club desde laúltima vez que tuve la oportunidad de estar con todos ustedes.
Feliz estancia en España a cuantos han venido de más allá de nuestras fronteras, y a todos, muchoséxitos en el apasionante y eficaz trabajo que ahora abordan.
Declaro inaugurada la Conferencia Anual del Club de Madrid.
Muchas gracias.