É
ste es sin duda un Acto de singular relevancia tanto por la importancia de la Orden que nos congrega, como por la calidad de quienes hoy en ella ingresan.
Creada en 1430, la Insigne Orden del Toisón de Oro es una de las más antiguas y prestigiosas del mundo.
Se incorporan como Caballeros a esta Orden dos destacadas personalidades españolas, Don Javier Solana Madariaga y Don Víctor García de la Concha, que acumulan brillantes trayectorias al servicio, por un lado, de la mayor proyección internacional de España y, por otro, de la unidad e irradiación de nuestra Lengua en todo el mundo.
Dos españoles de renombre internacional, que merecen el más alto reconocimiento por sus vidas de muy esforzada dedicación, constante entrega y numerosos logros, que han revertido en beneficio de nuestra gran Nación.
Su cultivo del saber y del rigor científico, así como su afán de perfeccionamiento -consustanciales a su condición académica- han impregnado el ejercicio de sus respectivas y destacadas responsabilidades.
En ambos, ese ejercicio de responsabilidades ha tenido como referente esencial el deseo de trabajar por una España moderna y democrática, abierta, tolerante y conciliadora, orgullosa de su unidad en la pluralidad y diversidad, y cada vez más presente en el mundo.
A su empuje y visión de futuro, suman un profundo sentido de la obligación y del compromiso, cualidades que explican lo muy intenso de su entrega vital.
Esa entrega siempre entusiasta hace que, tanto Javier Solana como Víctor García de la Concha, hayan vivido con auténtica pasión el desempeño de sus altas funciones.
De Javier Solana se ha dicho con razón que es uno de los españoles contemporáneos que más han hecho para que España esté más presente en el mundo y, también, para que el mundo esté más presente en España.
Gran español, al tiempo que gran europeo, además de asumir la Secretaría General de la Alianza Atlántica en tiempos complejos, ha sabido dotar con eficacia a la Unión Europea del rostro del que había carecido hasta entonces en materia de política exterior y de seguridad.
Activamente comprometido con los valores y principios que definen la obra de integración europea, ha servido durante tres lustros a la paz, la estabilidad y la democracia a escala internacional.
Por su parte, la trayectoria de Víctor García de la Concha al frente de la Real Academia Española, está marcada por una activa y decidida voluntad de contribuir a la expansión del español en el mundo, como idioma que pertenece por igual a todos los que lo hablan.
Desde esa profunda convicción, mucho es lo que debe a García de la Concha la unidad del español, gracias a su magistral saber y denodado esfuerzo en favor de la cooperación entre las veintidós Academias de la Lengua.
Ha aportado lo mejor de su impulso, aliento y energías, no sólo a grandes encuentros de Academias y a Congresos, sino también a magnas obras que son guías esenciales para todos los que compartimos el español.
Un idioma que hoy une a cerca de quinientos millones de personas, que es creciente vehículo de comunicación internacional, y uno de los más preciados tesoros que definen nuestro rico y variado patrimonio cultural.
Por todo ello, como Jefe y Soberano de la Orden, vengo en imponer hoy a Don Javier Solana Madariaga y a Don Víctor García de la Concha, el Collar de la insigne Orden del Toisón de Oro como prueba de mi aprecio y como reconocimiento de su entrega al servicio de España y de la Corona.
¡Enhorabuena a ambos de todo corazón!
Muchas gracias.