Buenos días a todos, Señoras y Señores,
La Reina y yo estamos realmente encantados de participar un año más en esta ceremonia en la que reciben su acreditación la nueva promoción de Embajadores Honorarios de la Marca España.
Por tanto, gracias al Foro de Marcas Renombradas Españolas por continuar con esta iniciativa tan acertada, que va ya por su 6ª edición y que la Corona ha apoyado desde sus inicios. De hecho han sido varias las ocasiones en las que hemos tenido el placer de acompañaros en un acto como este en diferentes lugares.
Y gracias al BBVA y a su Presidente por recibirnos a todos hoy como anfitriones al prestar estas instalaciones de su nueva sede corporativa, aquí en Madrid.
Cada uno de los nuevos embajadores, ─y todos en su conjunto─ habéis contribuido a proyectar en el mundo lo mejor de nuestra cultura, de nuestro talento, de nuestra capacidad y trabajo como sociedad. Quisiera mencionarles a todos, y no solo enunciarles en una lista, pero no puedo extenderme en todos sus méritos que son muchos y muy conocidos. Espero que, por ello, disculpen esta síntesis, quizás un poco injusta por breve.
Ainhoa Arteta es expresión y ejemplo del genio artístico español que siempre ha alcanzado las más altas cotas. Con su maestría, su sensibilidad y gran proyección personal pasea su voz por el mundo, traspasando generosamente ─y con gran estilo─ todo tipo de fronteras.
El Camino de Santiago ―del que me honro en ser Embajador de Honor― es la vía de concordia, de espiritualidad, de cultura y entendimiento que, desde hace más de un milenio, une a Galicia con las demás tierras de España, y a España con el conjunto de Europa.
Cáritas es exponente del mejor sentido solidario de la sociedad española, que ha hecho que miles de personas y familias hayan encontrado el amparo, el consuelo y la protección necesaria para seguir, día a día, adelante. Al reconocer o premiar su labor contribuimos ─como dije en 1999 al entregarles el Premio Príncipe de Asturias─ a la elevación moral de la sociedad, porque ninguna labor puede ser tan imprescindible y noble como la que está destinada a la asistencia a los más necesitados.
Pablo Isla representa el dinamismo de la empresa española en todo el mundo, su capacidad para proyectarse a todas las ciudades del planeta, para competir innovando y atendiendo al cliente global, para crear un universo de marcas; y su capacidad, sobre todo, de crear riqueza y de generar empleo.
Los hermanos Roca y el Celler de Can Roca ―su casa― son unos verdaderos maestros en ese “arte” tan nuestro y que tan buena imagen internacional nos da, la gastronomía. También lo son para combinar la mejor creatividad y la innovación con nuestras tradiciones más arraigadas. Y además llevan el éxito con especial simpatía, humildad y responsabilidad.
"...hoy quiero transmitir un mensaje de serenidad y confianza. La Constitución prevalecerá. Que nadie lo dude. La razón de ser y el funcionamiento de nuestro Estado Democrático de Derecho así lo garantiza. Nuestro Orden Constitucional, los principios constitucionales en los que se basa nuestra convivencia se mantendrán plenamente vigentes. Porque la España constitucional de nuestros días es un patrimonio que nos pertenece a todos; pertenece al pueblo español en quien reside la soberanía nacional y del que emanan todos los poderes del Estado..."
Edurne Pasabán nos hace revivir con su trabajo, con su coraje, con su espíritu de superación para llegar a las cimas más altas, las gestas de tantos españoles que, durante siglos, asombraron al mundo. Es, sin ninguna duda, la mujer española que más alto ha llegado —y más veces— por su propio pie. Y siempre, ha demostrado elegancia y generosidad.
Y el Instituto Valenciano de Infertilidad es un exponente de la excelencia y el liderazgo de la ciencia española. La innovación, la investigación y el desarrollo le han permitido ser hoy uno de los centros líderes a nivel mundial en el tratamiento de la infertilidad. Gracias a sus profesionales miles de personas han visto cumplidos sus sueños.
De Josep Piqué quiero subrayar su inquebrantable compromiso con España que siempre le ha acompañado en todos los altos destinos, políticos y profesionales, en los que ha servido. En no pocas ocasiones he sido personalmente testigo directo de ello.
A todos, nuestra más afectuosa felicitación y nuestra gratitud por aceptar esta nueva responsabilidad en beneficio de nuestro país, de su imagen y de su capacidad para estar presente más y mejor en el mundo. Merecéis este reconocimiento porque sois ejemplo de nuestro modo de ser, sois referentes de los valores que definen a la sociedad española, y porque representáis el modelo de progreso y de convivencia que el pueblo español ha sabido construir durante las últimas décadas.
Porque, sin duda, el mejor embajador de la Marca España, el mejor embajador de España es el pueblo español, son los españoles. Un pueblo que, después de tantos avatares históricos que condujeron frecuentemente a nuestro país a crisis, enfrentamientos y fracasos, optó —sabia y definitivamente— por la vía de la concordia y de la convivencia; del entendimiento y de la democracia.
Un pueblo que hace del cumplimiento de la ley ―de la ley democrática que nace de nuestra Constitución― su guía y su referencia diaria. Un pueblo que no está dispuesto a que se ponga en cuestión su unidad, que es la base de su convivencia en paz y libertad; que no está dispuesto a que se ponga en riesgo el modelo de progreso que, con su trabajo abnegado y comprometido, ha hecho posible el periodo de mayor desarrollo económico y social de nuestro país.
En nuestra larga historia hemos sabido superar grandes dificultades y los mayores desafíos. Ahora no es tiempo de regresar al pasado, sino de reafirmarnos en nuestra voluntad de un presente y un futuro de progreso compartido y de convivencia democrática.
Por ello, hoy quiero transmitir un mensaje de serenidad y confianza. La Constitución prevalecerá. Que nadie lo dude. La razón de ser y el funcionamiento de nuestro Estado Democrático de Derecho así lo garantiza. Nuestro Orden Constitucional, los principios constitucionales en los que se basa nuestra convivencia se mantendrán plenamente vigentes. Porque la España constitucional de nuestros días es un patrimonio que nos pertenece a todos; pertenece al pueblo español en quien reside la soberanía nacional y del que emanan todos los poderes del Estado.
Y quiero también para concluir, transmitir un mensaje de seguridad en la unidad y continuidad de nuestro proyecto de convivencia nacional. Un proyecto, un compromiso colectivo con nuestra convivencia democrática en el que el Rey, como Jefe del Estado, estará siempre al lado de todos los españoles.
A nuestros embajadores honorarios, gracias y, sobre todo, felicidades, zorionak, felicitats, parabens, y a todos que sigamos trabajando juntos por mantenernos en vanguardia.
Muchas gracias.