Buenos días a todos y gracias por estar esta mañana aquí para reconocer el trabajo voluntario y para celebrar la colaboración del tercer sector con la empresa privada.
Agradezco también al Banco Santander y a su presidenta, Ana Botín, su invitación para darme la oportunidad de dar visibilidad al compromiso de tantos ciudadanos que un día deciden detenerse, mirar a su alrededor y hacer algo para mejorar la vida de otras personas.
"...Gracias a todos, a los premiados, a los voluntarios, a los trabajadores del Santander. A todos los que piensan que vivir de espaldas a los demás no beneficia a nadie. Que tender una mano genera confianza. Y la confianza es la energía más valiosa. Y más útil. Tender una mano es, en definitiva, ser responsable y ser justo..."
Hoy se reconoce la labor de varias organizaciones que actúan en diferentes campos de la intervención social. Trabajan en el ámbito cultural, educativo, medio ambiental, en la inclusión social de población –sobre todo menores- en situaciones de riesgo, en la difusión de valores, en la discapacidad, en la investigación oncológica, en la cooperación al desarrollo.
Hoy estamos aquí porque muchos os habéis dado cuenta de que hay muchas más cosas que nos acercan de las que nos separan. Y hay metas que nos hermanan y hay un camino de mejora, de avance y de progreso que requiere del empeño de todos para que todos ganemos.
Y esas preocupaciones que tenemos en común han llevado a que muchas personas buenas y capaces hayan puesto en marcha proyectos que están transformando realidades. Gracias a todos, a los premiados, a los voluntarios, a los trabajadores del Santander. A todos los que piensan que vivir de espaldas a los demás no beneficia a nadie. Que tender una mano genera confianza. Y la confianza es la energía más valiosa. Y más útil. Tender una mano es, en definitiva, ser responsable y ser justo. Gracias.