Buenas tardes. Gracias por invitarme de nuevo a compartir una tarde en la que celebramos la emoción de la lectura y el poder reparador de un buen libro, sobre todo después de estos 14 meses de pandemia.
Nos convoca SM para entregar sus premios Barco de Vapor y Gran Angular. Y quiero felicitar a Beatriz Osés y a Chiki Fabregat por ser las autoras de las novelas ganadoras, Un bosque en el aire y El cofre de Nadie. Son dos historias sin nada en común, en apariencia, pero con una gran sintonía en sus valores: la diversidad, la búsqueda de la identidad, la certeza de que vivimos en comunidad y todos contamos, la importancia de los afectos, la tradición oral, la necesidad innegociable de valorar y cuidar los entornos naturales y la deuda de respeto y cariño que tenemos con nuestros mayores.
"...“Gracias por invitarme de nuevo a compartir una tarde en la que celebramos la emoción de la lectura y el poder reparador de un buen libro, sobre todo después de estos 14 meses de pandemia. Nos convoca SM para entregar sus premios Barco de Vapor y Gran Angular” a “dos historias sin nada en común, en apariencia, pero con una gran sintonía en sus valores: la diversidad, la búsqueda de la identidad, la certeza de que vivimos en comunidad y todos contamos, la importancia de los afectos, la tradición oral, la necesidad innegociable de valorar y cuidar los entornos naturales y la deuda de respeto y cariño que tenemos con nuestros mayores”.
“Termino con un agradecimiento que extiendo a todas las personas que durante estos meses de pandemia habéis contribuido a que nos sintamos mejor gracias a los libros: editores, autores, ilustradores, libreros, a todos los que trabajáis en la industria cultural del libro”..."
Insisto cada año y van unos cuantos: no hace falta tener 9 años o 17 para leer estas novelas. Les invito por tanto a compartir con Beatriz y con Chiki los pensamientos y las decisiones que toman la joven Nadia y el abuelo Leocadio. Los dos tienen el valor, la iniciativa y la fuerza de transformar su entorno. Y eso lo cambia todo.
Por muchas vueltas que demos y por mucho que buceemos en tesis doctorales, estadísticas oficiales, artículos científicos y periodísticos, conferencias magistrales… no hay grieta en esta verdad inapelable: leer sólo nos reporta beneficio. Y en estos tiempos en los que la pelea por ganar la atención de los más jóvenes se recrudece, parar, sentarse y abrir un libro (¡y leerlo!) es garantía de concentración, profundización y comprensión. Pensar antes de hablar y leer antes de pensar, que dice Fran Lebowitz.
Termino con un agradecimiento que extiendo a todas las personas que durante estos meses de pandemia habéis contribuido a que nos sintamos mejor gracias a los libros: editores, autores, ilustradores, libreros, a todos los que trabajáis en la industria cultural del libro.
Muchas gracias.