Me gustaría comenzar agradeciendo la invitación para presidir este acto conmemorativo de vuestro 40 aniversario, el de una institución esencial como es el ICEX. Me alegra compartir con vosotros su trayectoria de éxito, así como el reconocimiento a todos los que la habéis sustanciado y personificado.
Es una cifra, sin duda, importante; así que lo primero que quiero hacer es daros la enhorabuena por alcanzar esa edad con pleno provecho en el ejercicio de vuestra importante tarea y responsabilidad buscando el bien común, el beneficio de toda España. Es realmente gratificante saber cómo esta entidad ha evolucionado —y siempre creciendo— desde sus comienzos, a la par que tantas instituciones y, en general, nuestra economía y sector exterior; y lo es de manera muy especial haberlo comprobado personalmente desde que empecé a conocerla de cerca en mis primeros viajes oficiales como Príncipe de Asturias para acudir a las ferias internacionales en diversos países, cubriendo amplios mercados regionales.
Hablar de ICEX para mí implica, por lo tanto, hablar de importantes recuerdos en varias etapas de mi vida. Por ejemplo, esas ferias llamadas Expotécnias, Expohábitats o Expoconsumos (pues en lugares como Marruecos, Brasil, India, México, Rusia, Japón, China o Turquía…). También, mi participación en vuestro 25 aniversario, en el lanzamiento del “Plan USA”, en Nueva York, y en programas emblemáticos como “Exporta”.
Siendo ya Rey, recuerdo perfectamente el 40 aniversario del emblemático programa de Becas de Internacionalización, que se celebró en esta misma sede, y los distintos —y numerosos— foros y encuentros empresariales bilaterales organizados con ocasión de los viajes oficiales y de Estado.
Hemos compartido muchos momentos juntos, muchas experiencias acompañando y apoyando la proyección exterior de nuestras empresas y, en general, de la economía española; todas muy enriquecedoras y siempre útiles, y en las que también aprendí mucho.
"...Hablar de ICEX para mí implica, por lo tanto, hablar de importantes recuerdos en varias etapas de mi vida. Por ejemplo, esas ferias llamadas Expotécnias, Expohábitats o Expoconsumos (en Marruecos, Brasil, India, México, Rusia, Japón, China o Turquía…), mi participación en vuestro 25 aniversario, en el lanzamiento del “Plan USA”, en Nueva York, y en programas emblemáticos como “Exporta”.
Siendo ya Rey, recuerdo perfectamente el 40 aniversario del emblemático programa de Becas de Internacionalización, que se celebró en esta misma sede, y los distintos -y numerosos- foros y encuentros empresariales bilaterales organizados con ocasión de los viajes oficiales y de Estado.
Hemos compartido muchos momentos juntos, muchas experiencias acompañando y apoyando la proyección exterior de nuestras empresas y, en general, de la economía española; todas muy enriquecedoras y siempre útiles, y en las que también aprendí mucho.
Por ello en una ocasión como esta, quiero agradecer sinceramente al equipo de ICEX -y a la Secretaría de Estado de Comercio, en general- su trabajo riguroso. Y, por supuesto, también lo hago a todos los que cada día hacéis realidad los miles de proyectos y actividades impulsados por todo el mundo. Y que lo hacéis, además, con un magnífico nivel de profesionalidad y dedicación, demostrando una capacidad de respuesta ante los problemas muy eficaz y una notoria vocación de servicio público...."
Por ello en una ocasión como esta, quiero agradecer sinceramente al equipo de ICEX —y a la Secretaría de Estado de Comercio, en general— su trabajo riguroso. Y, por supuesto, también lo hago a todos los que cada día hacéis realidad los miles de proyectos y actividades impulsados por todo el mundo. Y que lo hacéis, además, con un magnífico nivel de profesionalidad y dedicación, demostrando una capacidad de respuesta, como por ejemplo ante las tremendas dificultades que supuso la pandemia COVID en marzo de 2020 “No pares, ICEX está a tu lado”, muy eficaz y una notoria vocación de servicio público.
Hoy es un día en el que también debemos reconocer y agradecer el trabajo de quienes ayudaron a construir esta gran empresa en sus distintas etapas –y con sucesivos gobiernos−: aportaron su conocimiento y esfuerzo, y lograron conducirla con visión sostenida y acierto, alzo la mirada y veo con agrado que muchos de los cuales estáis hoy aquí presentes.
Señoras y señores, queridos amigos de ICEX,
La internacionalización de la economía española, en momentos como los actuales, solo puede entenderse por la excelencia de nuestras empresas en el extranjero, la capacidad de nuestra economía para atraer inversión de calidad y la salida al exterior de nuestro talento, ojo, no me refiero a la “fuga de cerebros”, es otra cuestión; un intangible cada vez más valioso, mucho del cual tiene su origen precisamente en esta casa. Y con ello me refiero vuestras Becas de Internacionalización; ese programa que antes mencioné, tan conocido y prestigioso en España como fuera de nuestro país, y por el que siento un cariño especial; ya lo sabéis.
El ICEX −desde la Secretaría de Estado de Comercio− ha desempeñado un papel muy relevante en este proceso de apertura de España que nos ha convertido en el país que somos: abierto, dinámico y con una mirada siempre puesta en el futuro de nuestras empresas. Acabáis de hablar justamente del ICEX de los próximos 20 años, y estoy seguro –como todos aquí− de que seguirá evolucionando, creciendo, cumpliendo…, siempre con una continua y necesaria capacidad de adaptación. Sin perder los fundamentos y los valores que os representan y que tanto nos han aportado en las últimas décadas.
El ICEX, como herramienta esencial de la Secretaría de Estado, es un claro ejemplo de cooperación público-privada en el apoyo al desempeño exitoso de nuestras empresas en los mercados internacionales, ya que diseña y pone en funcionamiento sus instrumentos en colaboración con el sector privado. También es un ejemplo de colaboración territorial, a través del Consejo Interterritorial de Internacionalización, buscando conjuntamente con las Comunidades Autónomas la máxima eficacia de los instrumentos y programas, tanto de promoción exterior, como de inversión extranjera, e intentando evitar así posibles solapamientos y disfunciones. En definitiva, se trata de un medio con una buena práctica reconocida a nivel internacional.
Y, además, el ICEX cuenta con un componente único: una potente red exterior y también territorial, ambas dependientes de la Secretaría de Estado Un modelo singular, muy profesionalizado, que llega a casi 200 mercados y que se extiende por todo el territorio nacional.
Estas fortalezas, unidas a una trayectoria que la ha consolidado como institución y al afán continuo de superación y visión estratégica, auguran un gran futuro. Y en ese futuro —como también en este presente y al igual que sucedió en el pasado— podéis contar con el apoyo de la Corona.
Felicidades por estos 40 años de éxitos. Muchas gracias.