Un saludo al presidente de la Confederación de Salud Mental de España, querido Nel. Un saludo también, por supuesto, al presidente del Premio Annalista. A todas las amigas y amigos de las entidades sociales en torno a la salud mental. Muy buenos días a todos.
Creo que lo primero que conviene es felicitar por esas cuatro décadas de trabajo incansable a la Confederación de Salud Mental de España. Por cierto, también quiero dar la bienvenida al ministro de salud de la Confederación de Salud Mental del mundo, Roberto Mazzina. ¿Verdad? Así es, bienvenido también. Quería decir también, gracias Roberto. También empezar felicitando por esas cuatro décadas, porque poner en valor el trabajo de vuestro movimiento asociativo en estos 40 años es muy relevante. Hablar ahora de salud mental es algo menos raro, menos incómodo, por pensar lo que sucedía en España hace 40 años en la conversación pública sobre salud mental.
Enseguida vamos a ver un vídeo y Elena Briongos, que está aquí sentada también, dice cosas muy importantes sobre lo que pasaba hace 40 años. Así que es justo reconocer esa labor de lo que estáis haciendo por las personas en la defensa de sus derechos, de las personas con un diagnóstico de salud mental y con un objetivo además muy claro, que es tratar de que haya más recursos en el sistema público, para que os sintáis apoyados, acompañados, atendidos y escuchados. Felicidades por tanto por ese aniversario y enhorabuena por lo logrado.
En este Congreso vamos a conocer la situación actual de la salud mental en España, cómo han sido esos 40 años de recorrido también, como véis, fuera de nuestro país. Hay muchos análisis, muchos estudios, pero creo que hay uno especialmente importante, que es el que ha elaborado la Confederación junto con la Fundación Mutua Madrileña. Y os voy a dar solamente dos datos sobre ese estudio. El 40% de los españoles considera que su salud mental no es buena. Y el segundo, los españoles otorgan un 4,5 sobre 5 a la importancia en salud mental dentro de su bienestar general. Recomiendo la lectura detallada y minuciosa de ese estudio, porque arroja datos reveladores y porque dice cosas que parecen obvias, pero que hay que recordar.
"...la salud mental va más allá de lo sanitario, tiene que ver con lo social, con las oportunidades de trabajo, con condiciones de trabajo dignas, con la integración, con la educación, con evitar los estigmas, con las leyes de dependencia, con la información rigurosa desde los medios de comunicación, con la protección también a las cuidadoras y a los cuidadores..."
Como que la salud mental va más allá de lo sanitario, tiene que ver con lo social, con las oportunidades de trabajo, con condiciones de trabajo dignas, con la integración, con la educación, con evitar los estigmas, con las leyes de dependencia, con la información rigurosa desde los medios de comunicación, con la protección también a las cuidadoras y a los cuidadores. Y vosotros mismos, a vuestro movimiento asociativo, reconocéis que en los últimos tiempos ha habido avances. Es un hecho ya, ese número 024 de atención a la conducta suicida.
También, en algunas Comunidades Autónomas se están poniendo en marcha ciertas políticas para mejorar la vida de las personas contra el estrés mental. Pero advertís, ojo, que hablar de salud mental no puede ser una moda, no debe serlo. Eso tiene sus riesgos. Y nos recordáis, las cifras son tozudas. ¿Qué cifras? En España, por cada 100.000 habitantes, hay 6 psicólogos clínicos, 3 veces menos que la media europea y 11 psiquiatras, 5 veces menos que en Suiza y menos de la mitad que en Francia, que en Alemania y que en Países Bajos. Cifras. No hay salud sin salud mental.
Todos en algún momento necesitamos parar, admitir, ser conscientes de nuestras vulnerabilidades, de nuestras debilidades, poder expresar un no puedo, no sé, no siento, necesito tiempo, necesito parar. La educación temprana en salud, la prevención, nos dotaría de herramientas para poder gestionar las emociones, poder afrontar la adversidad y las situaciones traumáticas que todos tenemos en la vida. No es la primera vez que escuchamos a la comunidad científica y a la comunidad educativa pedir que se incluya la formación en salud en las etapas básicas de la educación. Infantil, primaria, secundaria, bachillerato, formación profesional, formación en salud.
Y cuando digo salud me refiero a algo integral. Se podría llamar la asignatura, por ejemplo, educación integral para la salud. Hace muchos años que la OMS viene recomendando que se incluya en los curriculum escolares la educación para la salud. Pero ellos lo llaman 'health literacy', que contiene no solo la gestión emocional, sino también cómo podemos entender esos pensamientos tóxicos que todos tenemos, cómo los podemos gestionar. Y luego lo que significa la elección que hacemos cada día sobre lo que comemos, lo que bebemos, cómo pensamos, los tóxicos que evitamos, el alcohol, el tabaco, productos ultraprocesados, cómo descansamos, el ejercicio que hacemos o que dejamos de hacer. Y cuando hablo también de conocimiento de la salud, es lo que recomienda la Organización Mundial de la Salud, tiene que ver con cuestiones, por ejemplo, diréis, esto es muy elevado, el metabolismo y la glucosa, la resistencia a la insulina. ¿Qué tiene que ver eso con la salud mental? Tiene que ver con sus componentes. Ahí dejo la idea.
Termino ya. Otro de los grandes aciertos de la Confederación de Salud Mental España es haber incorporado personas con un diagnóstico de salud mental en puestos de toma de decisiones, que están haciendo una labor importantísima y que les dicen cosas como que la sociedad se divida en dos clases, quienes necesitan apoyo y quienes están en condiciones de prestar ese apoyo. Hay que seguir haciendo mucho trabajo ahora que se empieza a hablar de salud mental, de la falta de salud mental, de los riesgos para la salud mental. Hay que seguir impulsando esa coordinación entre los ámbitos sanitario, social, educativo. Eso es lo que vosotros estáis haciendo durante 40 años. Por eso os admiramos, os respetamos y os agradecemos.
Muchas gracias y que vaya bien para todos. Gracias.