oña Letizia ha recibido en el Palacio de La Zarzuela a la coordinadora general de la Cruz Roja Española, María Ángeles Cacereño Ibáñez; la directora general de la Fundación Científica de la Asociación Española contra el Cáncer (AECC), Isabel Orbe Martínez-Avial; la directora general de la Federación Española de Enfermedades Raras (FEDER), Isabel Motero Vázquez; el presidente del Consejo General de la Organización Nacional de Ciegos Españoles (ONCE), Miguel Carballeda Piñeiro; el presidente de la Confederación Salud Mental España, Nel González Zapico; y el presidente del Comité Español de Representantes de Personas con Discapacidad (CERMI), Luis Cayo Pérez.
A través de estas organizaciones, Su Majestad ha podido conocer las diferentes iniciativas en las que están trabajando para atender a los afectados, especialmente a personas con necesidades especiales como discapacidades, procesos oncológicos, enfermedades raras, salud mental, entre otros. La Reina, por su parte, ha agradecido la labor que están realizando y ha pedido que como “los daños van a ser profundos y van a requerir mucho tiempo, esa atención constante y sostenida en el tiempo se prolongue más allá de los nueve días que llevamos”.
Cruz Roja ha explicado que participa activamente organizando equipos que actúan desde el terreno y coordina los recursos necesarios para trasladar a las zonas afectadas. Las labores de limpieza y desescombro han sido de las primeras necesidades a cubrir, y de hecho se siguen realizando, con equipos multidisciplinares que además de limpieza y desescombro, y según se va necesitando, realizan asistencia sanitaria inmediata y primeros auxilios psicológicos. En todos los equipos hay integradas personas especializadas en intervención psicosocial. Paralelamente a estas labores de limpieza, Cruz Roja cuenta con equipos encargados de distribuir materiales y alimentos - colaborando con la UME-, y de identificar necesidades de la población. En algunos casos, además, facilitan el restablecimiento de contacto entre los vecinos, dado el mal estado de las comunicaciones.
Otra función principal, gracias al acuerdo alcanzado con el Colegio de Farmacéuticos de Valencia, es que voluntarios y voluntarias de Cruz Roja colaboren también identificando a personas que necesitan recibir en sus domicilios medicamentos, trasladándoles hasta sus propias casas las medicinas necesarias, y detectando in situ posibles nuevas necesidades.
Por su parte la Federación Española de Enfermedades Raras (FEDER) está realizando un mapeo de las entidades afectadas, estableciendo niveles en base a su ubicación. En concreto, actualmente forman parte de FEDER, 38 entidades de la Comunidad Valenciana y un socio individual. De ellas, 8 entidades están en las zonas afectadas o están ubicadas en la provincia de Valencia y se han podido ver muy afectadas de forma indirecta por la ubicación de sus socios. FEDER se encuentra en una fase de mapeo de personas con enfermedades poco frecuentes afectadas de manera directa por la DANA. Hay familias afectadas con enfermedades poco frecuentes, con patologías severas y gran grado de dependencia y discapacidad que se encuentran en una situación de extrema vulnerabilidad. Desde los servicios de atención directa están contactando con ellos para poder conocer su situación concreta y acompañarlas en las necesidades que puedan tener. Desde la Federación, están dando apoyo en la tramitación de la primera ayuda directa para paliar las pérdidas de bienes de primera necesidad de las personas físicas y canalizan las peticiones para el reemplazo de material ortoprotésico que se haya perdido por la riada a través del protocolo establecido por la Conselleria de Sanidad.
Isabel Orbe, directora General de la Asociación Española Contra el Cáncer y la Fundación Científica ha trasladado cómo la asociación está ayudando a todos los pacientes con cáncer y sus familias. Ante la gravedad de lo sucedido, la Asociación ha puesto en marcha varias medidas de ayuda como traslados a hospitales, apoyo a pacientes de cáncer para que puedan trasladarse a los hospitales para el tratamiento oncológico, acompañados por voluntariado en todo momento, gestión de alojamiento para pacientes que hayan perdido su hogar o que por causa de la DANA tengan muy complicado desplazarse hasta el hospital desde sus domicilios; mantenimiento de la atención psicológica a pacientes y familiares y ha ofrecido el servicio a la Consejería de Sanidad y Colegio de Psicólogos de la Comunidad Valenciana para ofrecer el apoyo psicológico a cualquier persona afectada por la emergencia. En concreto se han atendido a 75 pacientes y 12 menores. Además, la AECC mantiene apoyo social y ha atendido a 471 personas por el equipo de Atención Social, sin perder la actividad del servicio de Infocáncer, centralizando todas las llamadas al servicio de Infocáncer (servicio de atención telefónica 24/7) para una garantizar una rápida respuesta. La asociación ha explicado también que ha organización el equipo de voluntariado con el objetivo de una mayor eficiencia en hacer llegar medicación, garantizando así su llegada a pacientes, y alimentos a las personas que lo necesiten. El voluntariado está llevando, a través de motos de montaña, alimentos y medicación a quien lo necesita. La AECC explica que quiere trasladar un mensaje de tranquilidad en relación a los posibles retrasos en los tratamientos oncológicos, ya que no suponen un riesgo en la eficacia del mismo en la mayoría de los casos. Además, solicitan y colaboran con autoridades en el desplazamiento y alojamiento urgente de las personas con cáncer que se encuentran en las zonas afectadas, y recuerdan la recomendación a la población con cáncer de extremar las medidas de higiene y protección, poniendo a disposición mascarillas, gel hidroalcohólico, etc.
El Grupo Social ONCE trabaja para seguir recopilando información y prestar cuanta ayuda sea posible a todos y todas los afectados por la Dana de Valencia (y otras zonas de España), especialmente a las personas ciegas o con discapacidad. Todo el personal operativo del grupo en la zona está trabajando para recuperar la normalidad, además de profesionales desplazados de otros puntos de la geografía. Se ha logrado contactar con todos los vendedores y vendedoras de las zonas afectadas; con la mayoría de las personas ciegas afiliadas a la ONCE (incluidos la práctica totalidad de los menores con discapacidad visual escolarizados), para quienes se está trabajando intensamente, al igual que para el resto de la ciudadanía.
El presidente del Grupo Social ONCE, Miguel Carballeda, ha subrayado la “total disposición” de la organización para estar al lado de la ciudadanía “no solo en estos momentos, sino en el largo proceso que conllevará recuperarse plenamente de lo ocurrido, en todos los ámbitos de la vida; esto va para largo y tenemos que dedicar mucho tiempo y recursos y ayudar mucho a la gente, también mentalmente”.
El Grupo Social ONCE permanece en contacto y colaboración directa con las autoridades, el movimiento asociativo de la discapacidad y al lado del Tercer Sector para contribuir en la resolución de cuantas necesidades llegan de recuperación de centros de día, asistenciales, mobiliario, equipamiento rehabilitador, ayudas técnicas o furgonetas adaptadas para la movilidad de estas personas; los hoteles Ilunion en Valencia están abiertos desde el principio (acogen personal y voluntarios de Cruz Roja y otras organizaciones, policía y bomberos de varias zonas de España,etc.); las lavanderías industriales están procesando todo lo que llega, recogiendo y donando ropa para los afectados; y también se está tramitando el reparto de alimentos no perecederos, productos de limpieza y sanitarios desde varias instalaciones del Grupo Social ONCE.
“Le hemos trasladado a la Reina que trabajamos primero en cuestiones urgentes, en las que hemos coincidido todos los asistentes, como recuperar la casa, el vehículo y otras cuestiones muy importantes, como sillas de ruedas que han desaparecido, audífonos, implantes cocleares… todo ello esencial para empezar a recuperar la normalidad”, ha contado Carballeda a la salida de la reunión.
Desde ayer, equipos específicos del Grupo Social ONCE, formados por técnicos de movilidad, trabajadores sociales y psicólogos están ya recorriendo las zonas más afectadas para atender a quienes lo necesitan mediante contacto directo con las familias, los menores, asistencia, escucha activa y apoyo en tramitación de ayudas, también para las organizaciones afectadas. Por ejemplo, técnicos de la ONCE están analizando el terreno para abrir vías de tránsito de personas ciegas desde sus domicilios a puntos de salida de autobuses, tratando de garantizar así su comunicación.
Por otro lado, el Grupo Social ONCE ha abierto una cuenta con el nombre "Todos a una voz con Valencia" para recaudar las aportaciones de las más de 71.000 personas ciegas afiliadas y las más de 75.000 personas empleadas y sus entornos más cercanos. El Grupo Social ONCE igualará la cantidad aportada para entregarla en la gestión actual y posterior, dirigida a las personas más necesitadas. Además, está ya abierta una línea de préstamos a coste cero para afiliados y trabajadores para mobiliario, domicilios, vehículos y necesidades más urgentes.
El CERMI, por su parte, ha trasladado a la Reina la necesidad de que la respuesta a la catástrofe que ha asolado la provincia de Valencia sea sobre todo social. Así lo ha expresado el presidente del CERMI, Luis Cayo Pérez Bueno, en una reunión en la que asegura que todos los participantes han coincido en señalar la necesidad generar y promover una “cultura de las emergencias en España, en su dimensión social” para saber abordar y gestionar situaciones de emergencia en su vertiente social y de afección a los grupos más vulnerables que, lamentablemente, serán cada vez más frecuentes e intensas.
Al respecto, el presidente de CERMI ha sugerido la posibilidad de trabajar hacia el futuro en una conferencia sobre “la dimensión social de las emergencias”. “Debemos producir conocimientos suficientes para crear una cultura de social sobre el tema, creando conciencia pública y lugar en la agenda política”. ha declarado Pérez Bueno.
Durante la reunión también se ha dedicado un espacio concreto al impacto de la salud mental en las víctimas, en los cuidadores y en todas aquellas personas que están interviniendo en esta catástrofe natural. Todos han coincidido en la necesidad de “intervenir” y “tutelar” su bienestar mental para protegerlos.