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uy buenos días y sean todas las personas bienvenidas a este día de celebración en el que, al menos hoy, podemos sentir que hacemos como sociedad las cosas un poco mejor. Es lo que inspira y lo que han conseguido la Cruz Roja y la Media Luna Roja hace 160 años. Es la larga historia de un movimiento que ha evolucionado junto a quienes sirve, ampara, protege y cuida. Cualquier persona en una situación de vulnerabilidad, de enfermedad, de necesidad, de desamparo, violencia, desigualdad, discriminación, soledad, riesgo de marginalidad, encuentra en Cruz Roja una respuesta, una voz amable y una mano tendida.
"...Detrás de Cruz Roja hay un enorme esfuerzo, un esfuerzo colectivo de profesionales, voluntarios —gracias— socios, administraciones, sector privado, todos de algún modo formamos parte de Cruz Roja. Un esfuerzo de independencia, de humanidad, de neutralidad, para que quien lo necesite pueda seguir caminando, porque todos en algún momento necesitamos un poco de ayuda, o mucha ayuda. Y es lo que hoy nos permite, al menos hoy, celebrar esos 160 años que empezaron con un par de preguntas aparentemente sencillas. ¿Cómo te sientes? ¿Cómo puedo ayudarte?..."
Y es por eso que hoy estamos entregando estas medallas a cinco entidades que, como hemos visto, además comparten los valores de Cruz Roja y reflejan esa excelencia de quien se guía por el compromiso, por la responsabilidad y por el deseo de que la sociedad sea un poco más justa y más equilibrada. La protección de los bosques contra los incendios y su prevención, los espacios de reflexión para el análisis de los retos sociales, el cuidado en toda su dimensión de las personas mayores, la investigación científica más excelente y, por supuesto, la protección y asistencia de quienes sufren la guerra. Son los campos de actuación, contados de un modo resumidísimo, a los que abarcan estas entidades que hoy reconocemos. Y las personas que colaboran y que trabajan en estas organizaciones saben que cada tiempo tiene su desafío, que no hay atajos y que no hay soluciones fáciles, solo cuenta el trabajo constante, con voluntad, con estrategia, con eficacia. Así que gracias por vuestra labor y por vuestra implicación.
Detrás de Cruz Roja hay un enorme esfuerzo, un esfuerzo colectivo de profesionales, voluntarios —gracias— socios, administraciones, sector privado, todos de algún modo formamos parte de Cruz Roja. Un esfuerzo de independencia, de humanidad, de neutralidad, para que quien lo necesite pueda seguir caminando, porque todos en algún momento necesitamos un poco de ayuda, o mucha ayuda. Y es lo que hoy nos permite, al menos hoy, celebrar esos 160 años que empezaron con un par de preguntas aparentemente sencillas. ¿Cómo te sientes? ¿Cómo puedo ayudarte? Gracias, por tanto. Gracias.