Buenos días a todos,
Me alegra mucho estar con vosotros en este acto tan especial, en el que celebramos 10 años de trabajo, compromiso y logros. Desde el día en el que pude acompañaros en su presentación y con una relación previa con las Cámaras, he sido testigo de vuestro incansable esfuerzo, de vuestro crecimiento y del impacto tan positivo de vuestro trabajo, que trasciende el ámbito nacional. Así que, antes de nada, muchas felicidades por este aniversario; una cifra muy significativa, que, por cierto, compartimos.
En aquel acto de presentación afirmé que existían muchos campos en los que la Cámara estaba destinada a hacer una contribución muy valiosa: la internacionalización, la competitividad y las ayudas a pymes y autónomos. Hace una década dichos ámbitos eran estratégicos. Hoy son imprescindibles debido a los grandes cambios y retos a los que se enfrenta el sector empresarial: la globalización con sus impulsos y sus riesgos, la transformación verde y digital, gran reto de nuestros días, la competitividad y el apoyo, tan necesario en nuestro país y ante la complejidad, a las PYMES.
En nuestro mundo actual y ante el futuro (aunque hacer predicciones es siempre arriesgado) se reafirma la evidencia de que, la internacionalización sigue y seguirá siendo fundamental para que las empresas accedan a nuevos mercados y diversifiquen sus ingresos, una línea de actuación especialmente importante tras las lecciones aprendidas en momentos de crisis económicas o sanitarias; de las que hemos salido gracias, en una parte muy importante, a nuestra apertura y apuesta exterior diversificada.
A este respecto, hay que destacar el trabajo de la red de Cámaras en el exterior, que, junto a nuestras OFCOMES de la Secretaría de Estado de Comercio, trabajan para reforzar la internacionalización de las empresas españolas y prestan un servicio de enorme importancia, dando cobertura a las empresas en los países de destino.
Por otra parte, la digitalización ha cambiado las reglas del juego. Las empresas necesitan ser altamente competitivas, no solo en eficiencia, sino también en innovación, sostenibilidad y rápida capacidad de adaptación a los cambios tecnológicos.
En cuanto a adaptación, es preciso destacar la labor de la Fundación INCYDE de las Cámaras de Comercio en el impulso de la mayor red europea de apoyo al emprendimiento a través de sus viveros, coworking digitales e incubadoras de alta tecnología.
"...me alegra mucho estar con vosotros en este acto tan especial, en el que celebramos 10 años de trabajo, compromiso y logros. Desde el día en el que pude acompañaros en su presentación, he sido testigo de vuestro incansable esfuerzo, de vuestro crecimiento y del impacto tan positivo de vuestro trabajo, que trasciende el ámbito nacional. Así que, antes de nada, muchas felicidades por este aniversario; una cifra muy significativa, que, por cierto, compartimos..."
Por último, las PYMES siguen siendo el motor de nuestras economías, pero también el sector más sensible o expuesto ante los cambios del mercado. Se enfrentan a desafíos como la incertidumbre económica y la necesidad de adaptarse a nuevas normativas y tendencias. Más que nunca, requieren un respaldo sólido para mantenerse y para crecer.
A ellas se dirigen los programas de la Cámara de España, que se aplican a través de las Cámaras territoriales. Gracias a su capilaridad (84 cámaras) estas ayudas llegan a las pymes localizadas por todo nuestro territorio.
Este alcance y permeabilidad son los factores que explican el éxito de las iniciativas camerales, y también por qué tanto instituciones públicas como privadas colaboran con las Cámaras de Comercio. Una colaboración de esfuerzos públicos y privados enfocada hacia un mismo objetivo: avanzar hacia un país más próspero, basado en la innovación y en el talento como bases para una economía sólida y sostenible. Y en eso, el mensaje de fondo de esta Cámara de España, de unidad, ha sido y será fundamental.
Señoras y señores,
Es cierto −como decías, presidente− que en estos 10 años hemos vivido acontecimientos inéditos que han transformado nuestro entorno económico y social. A lo largo de este tiempo, ha habido un elemento constante: la labor de las Cámaras de Comercio como agentes del cambio. Su compromiso ha sido clave para informar, apoyar y acompañar a las empresas en la gestión de ayudas, el desarrollo de programas específicos para afrontar los retos emergentes y la búsqueda de soluciones prácticas. Lo acabamos de ver en la proyección que nos ha recordado algunos casos de éxito de diversas pymes ubicadas en distintos puntos de nuestra geografía.
Además, las Cámaras han trabajado incansablemente para impulsar la formación, con un enfoque especial en los jóvenes, ayudándoles a mejorar su empleabilidad y preparándolos para un mercado laboral en constante evolución. Esta dedicación ha sido fundamental para fortalecer el tejido empresarial.
No puedo terminar sin agradecer, querido José Luis, tu incansable trabajo, tu liderazgo, al frente de la Cámara durante estos diez años en los que tu contribución ha sido decisiva para su proyección y éxito.
La Cámara llega a este 2024 convertida en una institución estratégica, a través de la puesta en marcha de proyectos que crean valor añadido para la economía y que contribuyen a la prosperidad presente y futura de España.
Y es precisamente en el futuro donde debemos poner el foco. Mis mejores deseos para los próximos pasos que deis, pues estoy convencido de que continuarán dejando una huella profunda y positiva. Y, como dije en el acto de presentación de la Cámara, os recuerdo y reitero que, en vuestra misión, firmemente comprometida con el interés general, siempre podréis contar –como hasta ahora− con todo el apoyo de la Corona.
Muchas gracias y felicidades de nuevo.