l Rey llegó a la Casa de América y fue recibido por la presidenta del Senado, Pilar Llop; los presidentes del Tribunal Constitucional y del Tribunal Supremo y del Consejo General del Poder Judicial, Juan José González Rivas y Carlos Lesmes respectivamente; el ministro de Justicia, Juan Carlos Campo; el alcalde de Madrid, José Luis Martínez-Almeida; y por el presidente de Cremades & Calvo-Sotelo y presidente de la World Jurist Association, Javier Cremades, y resto de autoridades y presidentes de Cortes y Tribunales Internacionales.
A continuación, dio comienzo la ceremonia de entrega del Premio WJA Medalla de Honor Ruth Bader Ginsburg con la proyección de un vídeo de la World Jurist Association y la intervención de su presidente, Javier Cremades. Seguidamente, se produjo la presentación de las personas condecoradas con la Medalla de Honor de la World Jurist Association Ruth Bader Ginsburg, y se proyectaron sendos vídeos de saludo de las jueces Navi Pillay, magistrada ad hoc de la Corte Internacional de Justicia de La Haya (Sudáfrica) y Sujata Manohar, magistrada de la Corte Suprema de la India, que no han podido asistir.
Su Majestad el Rey hizo entrega de una Placa como tributo a la figura de la juez Ginsburg, a su hija, la profesora de la Facultad de Derecho de Columbia y presidenta del Jurado, Jane Ginsburg, y entregó las medallas a:
- Maite Oronoz, presidenta de la Corte Suprema de Puerto Rico.
- Rosario Silva De Lapuerta, vicepresidenta del Tribunal de Justicia de la Unión Europea.
- Luz del Carmen Ibáñez, vicepresidenta de la Corte Penal Internacional.
- Gillian Triggs, alta Comisionada adjunta de las Naciones Unidas para la Protección de los Refugiados.
- Young Hye Kim, juez comisaria de la Comisión Nacional de Derechos Humanos.
- Christine Lagarde, presidenta del Banco Central Europeo.
La Señora Lagarde pronunció unas palabras de agradecimiento en nombre de las galardonadas.
La ceremonia concluyó con un encuentro de Don Felipe con los asistentes. Posteriormente, tuvo lugar un almuerzo.
Por la tarde, continuó el encuentro con la celebración de la mesa redonda “La igualdad y el estado de derecho: contribución de las Cortes Internacionales” con las intervenciones del relator especial de Naciones Unidas sobre la independencia de los jueces y abogados, Diego García-Sayán, y del moderador, Eduardo Ferrer Mac-Gregor, y la participación de la presidenta de la Corte Interamericana de Derechos Humanos, Elizabeth Odio Benito; del presidente de la Corte Penal Internacional, Piotr Hofmanski; del presidente del Tribunal Europeo de Derechos Humanos, Robert Spano; de la vicepresidenta del Tribunal de Justicia de la Unión Europea, Rosario Silva De Lapuerta; y de la vicepresidenta del Tribunal Africano de Derechos Humanos y de Derechos de los Pueblos, Imani Daud Aboud.
Tras finalizar la mesa redonda, Don Felipe presidió el acto de clausura de esta primera jornada que se inició con las intervenciones del Presidente de la World Jurist Association y del presidente de la República de Colombia, Iván Duque.
Para finalizar, Su Majestad el Rey se dirigió a los asistentes y señaló que para que “la Constitución y las leyes sean obedecidas y desplieguen su eficacia es preciso que haya jueces que así lo aseguren. Por ello, además de los controles políticos, electorales y parlamentarios, y del mismo control social por los propios ciudadanos, controles que son consustanciales al Estado democrático, ha de existir el control jurisdiccional que exige un Estado de Derecho”.
“De ahí el papel fundamental que el Poder Judicial independiente desempeña: dota de eficacia a la Constitución y al resto del ordenamiento jurídico, protege las libertades ciudadanas, y asegura, en fin, que el sistema normativo conserve su vigencia.”
Continuó diciendo que la “firme defensa de la Constitución como norma suprema, su constante preocupación por interpretarla de manera adecuada -para que despliegue su doble condición jurídica de límite al ejercicio del poder y garantía de los derechos de los ciudadanos- siempre estuvo unida a su convicción de que la Constitución también desempeña una función política fundamental: ser un verdadero instrumento de integración social, un marco inclusivo en el que la sociedad se refleje, en el que el pluralismo político se garantice, y en el que la esperanza en un futuro mejor se preserve”.
“...solo atendiendo a esos dos significados fundamentales -jurídico y político- de la Constitución, pueden conseguirse los fines últimos que ésta persigue: la convivencia ciudadana en paz, justicia, igualdad y libertad, y donde los Derechos Humanos sean respetados con la máxima dignidad y eficacia”, dijo Su Majestad el Rey.
Este encuentro internacional de juristas organizado por la World Jurist Association (WJA) y la World Law Foundation (WLF), creada en 2019 tras la XXVI edición del World Law Congress (WLC) celebrado en Madrid, convirtiendo así a Madrid en la capital mundial del derecho los días 5 y 6 de julio.
Este es un encuentro previo a la celebración de la XXVII edición del WLC, que tendrá lugar en Cartagena de Indias (Colombia) los días 2 y 3 de diciembre de este año. “El objetivo de la WJA es promover la concienciación de la importancia del Estado de Derecho en la sociedad”.
En esta primera jornada se ha rendido homenaje, tras su fallecimiento el pasado septiembre, a la juez estadounidense Ruth Bader Ginsburg, reconocida por su trabajo en la lucha por la igualdad legal de género. En febrero de 2020 recibió el “World Peace and Liberty Award”, otorgado por la World Jurist Association, en la American Bar Association. Su Majestad Rey fue galardonado con el mismo premio, que se considera como el “Nobel del Derecho”, en febrero de 2019 durante el último World Law Congress de Madrid. Se celebró un coloquio con algunos juristas que conocieron a la magistrada y asistieron profesores y decanos procedentes de distintas universidades de todo el mundo. Otras personas que se han destacado por promover la paz en el mundo a través del Derecho y que también recibieron el “World Peace and Liberty Award”, fueron Winston Churchill, Rene Cassin, Nelson Mandela.
Han asistido al encuentro presidentes de Tribunales Constitucionales, contando con los presidentes de las Cortes Internacionales de Derechos Humanos de África, Europa y América, así como de la Corte Penal Internacional, reunidos por primera vez en una mesa para discutir sobre la igualdad en la jurisprudencia internacional y se han entregado las medallas de honor “WJA Ruth Bader Ginsburg” a cinco mujeres. La presidenta del jurado ha sido Jane Ginsburg, hija de la juez.
Durante la segunda jornada habrá varios debates; Juan José González Rives, presidente del Tribunal Constitucional de España, se encargará de moderar una mesa redonda sobre la independencia del poder judicial en Europa y América.