ste homenaje, organizado por la Fundación Consejo España-Estados Unidos y la Cámara de Comercio de Bilbao, recuerda la figura de Diego María de Gardoqui, comerciante bilbaíno y primer Embajador de España en Estados Unidos.
Cuarto hijo de ocho hermanos, Diego María de Gardoqui nació en Bilbao el 12 de noviembre de 1735. A los 28 años, alcanzó categoría de Prior Segundo del Consulado de Bilbao. Junto a su hermano mayor, José Joaquín, impulsó la proyección comercial de la firma familiar, que consolida sus relaciones europeas en Londres y las americanas en Salem. Posteriormente, fue nombrado Prior del Consulado, lo que le supuso acreditación y reconocimiento de méritos en la más alta institución mercantil de la Villa.
La primera sesión del seminario ha estado dedicada a "La figura de Gardoqui en el mundo de los negocios y el comercio de Bilbao", con José Luis Cano Gardoqui como moderador y las ponencias "El entorno mercantil de Bilbao en la segunda mitad del siglo XVIII", por Aingeru Zabala, y "La familia Gardoqui en la esfera mercantil de la época", por Reyes Calderón.
"La figura de Gardoqui en la esfera diplomática y política" ha sido el tema de la segunda sesión, con Alfonso Sainz Valdivielso como moderador y las ponencias "La política exterior de España y Francia en relación con la independencia de los Estados Unidos", por José Manuel Allendesalazar, y "La actividad política y diplomática de Diego María de Gardoqui", por Eduardo Garrigues.
A su llegada al Museo Guggenheim, Don Felipe y Doña Letizia fueron recibidos por el lehendakari del Gobierno Vasco, Juan José Ibarretxe, el delegado del Gobierno en la Comunidad Autónoma del País Vasco, Paulino Luesma, el diputado general de Vizcaya, José Luis Bilbao, el alcalde de Bilbao, Iñaki Azcuna, la consejera de Cultura y portavoz del Gobierno Vasco, Miren Azkárate, y el director general del Museo Guggenheim de Bilbao, Juan Ignacio Vidarte.
Sus Altezas Reales realizaron a continuación una visita privada al Museo. Tras su recorrido, los Príncipes de Asturias fueron saludados en el vestíbulo exterior del Auditorio por el embajador de los Estados Unidos de América en España, Eduardo Aguirre, el presidente de la Fundación Consejo España-EE.UU., José Ignacio Goirigolzarri, el presidente de la Cámara de Comercio de Bilbao, Ignacio Echeberría, el patrono de la Fundación Consejo España-EE.UU. y presidente de honor del Grupo Vocento, Santiago de Ybarra, el patrono de la Fundación Consejo España-EE.UU. Gustavo de Arístegui, y el presidente de la Cámara de Comercio Americana en España y patrono de la Fundación Consejo España-EE.UU., Jaime Malet.
Accedieron seguidamente Don Felipe y Doña Letizia al Auditorio y ocuparon su lugar en la mesa presidencial. El subdirector general para América del Norte del Ministerio de Asuntos Exteriores y de Cooperación y secretario general de la Fundación Consejo España-EE.UU., Fernando Prieto, en calidad de maestro de ceremonias, anunció las intervenciones del alcalde de Bilbao, del presidente de la Fundación Consejo España-EE.UU., del embajador de los Estados Unidos de América, y finalmente, de Su Alteza Real el Príncipe de Asturias.
Don Felipe felicitó a los participantes en el seminario, cuyos trabajos han permitido "ahondar, subrayar y entender mejor la contribución de un hombre clave en el nacimiento y posterior desarrollo de las intensas relaciones de amistad que ligan a España y a los Estados Unidos de América", "una labor fructífera que, en esta ocasión, ha podido recordar la fraternal colaboración entre estadounidenses y españoles en el proceso de gestación de los Estados Unidos de América, de tan fecundo resultado. Recordar esto es una iniciativa que celebro muy especialmente porque en definitiva contribuye a concienciar a nuestras respectivas opiniones públicas acerca de la impronta de España en la historia de los Estados Unidos; y es una manera excelente de conocernos mejor y de compartir la historia como fue, para así compartir mejor el futuro".
Asimismo, Su Alteza Real destacó la importancia de la figura de Gardoqui, "un verdadero exponente de la influencia extraordinaria de muchas personalidades relevantes y distinguidas del País Vasco que han contribuido a conformar la historia, la cultura y la proyección internacional de España a través de los tiempos".
El Príncipe recordó "el gran arraigo de la amistad y del mutuo respeto que vinculan a España y a los Estados Unidos. Amistad y respeto hoy acrecentados por tantos lazos y realidades intensas, producto de décadas de estrechos contactos e intercambios políticos, económicos, comerciales, científicos y culturales. Esa realidad actual se ve ampliamente favorecida por un compromiso coincidente con los mismos valores y principios de la libertad y la democracia, y por nuestra común condición de aliados y de socios en innumerables proyectos de carácter bilateral y en organismos o foros multilaterales. Los grandes flujos migratorios, que han transformado la sociedad norteamericana, con el peso renovado de la minoría hispana, y la creciente importancia de las inversiones de empresas españolas en Estados Unidos son algunas de las razones por las que hoy, ambos países, deben esforzarse aún más, si cabe, por recuperar y poner en valor su pasado histórico compartido y explotar ?insisto- las grandes posibilidades de colaboración que se abren para el futuro".
Un breve encuentro con los asistentes puso el colofón al acto, siendo Sus Altezas Reales despedidos por las mismas personas que les recibieron a su llegada.