Viaje de trabajo de Su Majestad el Rey a la Federación de Rusia

A su llegada al aeropuerto de Vnukovo II, en la tarde del miércoles, 18 de julio, fue recibido por el embajador de España en la Federación de Rusia, Luis Felipe Fernández de la Peña, el viceministro de Asuntos Exteriores de la Federación de Rusia, Vladimir Titov, y el embajador de la Federación de Rusia en España, Yury Korchagin.

Su Majestad el Rey comenzó la jornada del jueves, 19 de julio, con un encuentro con el alcalde de Moscú, Sergey Sobyanin, en el que estuvieron acompañados por los ministros de Asuntos Exteriores y de Cooperación y el de Industria, Energía y Turismo, el secretario de Estado de Comercio, Jaime García-Legaz, el alto comisionado para la Marca España, Carlos Espinosa de los Monteros, y la representación empresarial. Durante la reunión, se abordaron las posibilidades de colaboración con las compañías españolas.

Posteriormente, en la Residencia de Invitados del Gobierno ruso, Don Juan Carlos mantuvo una reunión con el primer ministro del Gobierno de la Federación de Rusia, Dmitry Medvédev, a la que también asistieron los ministros españoles, el embajador de España en Rusia, el secretario de Estado de Comercio y el alto comisionado para la Marca España. Entre los temas abordados se encontraban la tramitación de visados para los turistas rusos que visiten España, la cooperación económica entre los dos países y a los avances logrados durante la celebración del Año Dual España-Rusia en 2011. Don Juan Carlos también agradeció al ex Presidente y actual primer ministro Medvédev la concesión del Premio Estatal Ruso 2010.

Pasado el mediodía, Su Majestad el Rey se trasladó al Palacio del Kremlin, donde mantuvo un encuentro con el Presidente de la Federación de Rusia, Vladimir Putin, quien le entregó el Premio Estatal de la Federación de Rusia.

Esta distinción consiste en un diploma y una insignia, que fue impuesta por el Presidente ruso en la solapa. Su Majestad el Rey decidió donar los 125.000 euros de la dotación económica del premio a la restauración del patrimonio histórico-cultural destruido por los terremotos de Lorca. El galardón fue concedido por el anterior Presidente, Dmitry Medvédev, 23 de febrero de 2011, en reconocimiento a "sus destacados logros en actividades humanitarias", en el marco de la transición española.

Es la máxima distinción que se entrega en Rusia y laúnica que se otorga a personalidades extranjeras. Entre los poseedores se encuentran el ex Presidente de la República Francesa Jacques Chirac, el escritor Alexander Solzhenitsin y la cosmonauta Valentina Tereshkova.

Tras la entrega del premio, Don Juan Carlos pronunció unas palabras de agradecimiento, en las que destacó que se sentía "profundamente honrado al recibir hoy de vuestras manos el título de Laureado del Premio Estatal de la Federación de Rusia por Destacados Logros en Actividades Humanitarias, un galardón con el que siento se ensalzan los históricos y amistosos lazos que unen a nuestros pueblos".

También subrayó, sobre las relaciones históricas entre Rusia y España, que "son viejos y grandes Estados cuyas relaciones hunden sus raíces en la Historia. En 1667 llegó al puerto de Cádiz el primer Embajador ruso en España. Precisamente fue en Cádiz donde un siglo y medio después, en 1812, vio la luz la primera Constitución española".

"Es esa una fecha de marcada relevancia en la historia de nuestros dos países, pues aquel año fue también el de la primera guerra patria rusa, hitos ambos que alimentaron la grandeza de nuestras naciones y cuyos bicentenarios celebramos hoy con orgullo", añadió Don Juan Carlos. "Rusia fue", de lo que se alegró recordar, "el primer Estado en otorgar reconocimiento internacional a las Cortes de Cádiz, a través del'Tratado de amistad, sincera unión y alianza entre nuestros dos países', firmado por el Zar Alejandro I".

"La Constitución gaditana se convirtió en referente de un debate político que prendió en toda Europa, que inspiró el desarrollo político de nuestras naciones hermanas iberoamericanas y que llegó a convertirse en emblema de libertad también en Rusia". "El pensador y filósofo español José Ortega y Gasset señaló que España y Rusia son dos puntos clave de lo que dio en llamar'la gran diagonal europea', pues aunque alejados del centro geográfico del continente, ambos pueblos resultan imprescindibles para comprender la identidad europea en toda su dimensión humanista", puso de relieve el Rey.

Respecto a las relaciones entre Rusia y la Unión Europea, Su Majestad señaló que "Rusia se ha consolidado como socio de primer orden de la Unión Europea pues nuestra vinculación va mucho más allá de la evidente vecindad. Rusia y la Unión Europea somos miembros de una misma familia". "En este sentido sabéis bien que en todo lo que atañe a las relaciones con la Unión Europea podéis contar con el apoyo amigo de España", agregó

Por otra parte, "los cambios en el mundoárabe y los procesos de transición política que se están viviendo en el Mediterráneo y en el mundoárabe abren la posibilidad de construir, entre todos, espacios de entendimiento y de cooperación". El Rey destacó el trabajo en común frente a la crisis de Siria diciendo que "compartimos responsabilidades y por ello debemos unirnos para poner fin al drama que se vive en Siria. El marco para ello es sin duda el de Naciones Unidas".

También Don Juan Carlos se refirió a la generosa aportación económica asociada al Premio, que "fue destinada a la ciudad española de Lorca que, como sabéis, sufrió los efectos de un terremoto el año pasado. Con nuestro recuerdo a las personas que entonces fallecieron en aquel seísmo, y reiterando también nuestro mayor afecto a quienes en fechas recientes han sufrido las inundaciones de Krasnodar".

La visita de trabajo concluyó con un almuerzo de trabajo, que fue presidido por el Presidente Putin y Don Juan Carlos, al que asistieron las delegaciones de ambos países, junto con los empresarios asistentes al foro empresarial hispano-ruso.

Al inicio del almuerzo, Su Majestad el Rey se refirió a las reformas tomadas por España ante la crisis, manifestando que "estamos haciendo un gran esfuerzo en materia presupuestaria; somos conscientes de que la austeridad y el control del gasto son requisitos imprescindibles pero no suficientes para superar esta crisis; hay que tomar medidas también que impulsen el crecimiento". "Para ello hemos puesto en marcha una profunda reforma estructural de la economía con el objetivo de recuperar la confianza y credibilidad de los mercados y volver a la senda del crecimiento y la creación de empleo, principal problema de nuestro país", señaló Don Juan Carlos.

"Si no se actúa para estabilizar los mercados de deuda no será posible que vuelva a fluir el crédito al sector privado y por tanto será imposible asegurar el crecimiento". "España siempre ha salido reforzada de las crisis que hemos padecido en el pasado y estamos firmemente convencidos de que en esta ocasión también lo haremos y que las medidas adoptadas pronto darán sus frutos", aseguró el Rey.

Asimismo, Don Juan Carlos destacó de las empresas españolas que le acompañan en su viaje que "han querido subrayar con su presencia la importancia que atribuimos a las relaciones económicas entre nuestros dos países. Casi todas ellas están participando actualmente en licitaciones con organismos rusos o están a punto de firmar, o ya han firmado contratos con algún socio local". "Son empresas líderes en elámbito de la energía, las infraestructuras, el transporte y la ingeniería que tienen un gran interés en participar en muchos proyectos de modernización del país. Nos gustaría que en el Programa de Partenariado para la Modernización que han suscrito Rusia y la Unión Europea, España tenga una participación muy activa y un gran protagonismo", manifestó el Rey.

Del turismo entre Rusia y España, subrayó que "en el año 2012 se espera que por primera vez se rebase la cifra del millón de turistas rusos que visitan España. Como sabe muy bien, España siempre ha sido partidaria de avanzar de forma decidida hacia el objetivo de la eliminación de visados, lo que ayudaría a aumentar el número de turistas en las dos direcciones".

Una vez finalizado el almuerzo de trabajo, Su Majestad el Rey emprendió su regreso a España.