on Felipe ha presidido la reunión del Pleno Extraordinario de la Cámara de Comercio, Industria, Servicios y Navegación de España, corporación de derecho público integrada por las entidades más representativas de la vida económico-empresarial del país. A su llegada a la sede de la Cámara de Comercio de España fue recibido por la vicepresidenta primera del Gobierno y ministra de Asuntos Económicos y Transformación Digital, Nadia Calviño y el presidente de la Cámara de Comercio de España, José Luis Bonet.
Tras la intervención del presidente de la Cámara de Comercio de España, se proyectó un video y seguidamente tuvo lugar una mesa redonda sobre los “Ejes de la transformación de la economía española”, moderada por la secretaria de Estado de Comercio, Xiana Margarida Méndez.
Durante la celebración del Pleno Extraordinario se expuso a Su Majestad el Rey los objetivos estratégicos del tercer mandato de José Luis Bonet como presidente de la Cámara de España, así como el balance de los ocho años de existencia de la institución.
Asimismo, y de la mano de las empresas que forman parte del Pleno, así como de las cámaras de comercio, se profundizó en las cuestiones más relevantes en las que se centrará el trabajo de la Cámara de España en los próximos cuatro años, como son la digitalización, la sostenibilidad, la internacionalización, la formación y el emprendimiento.
Su Majestad el Rey, en su intervención, destacó que "la Cámara de España constituye un modelo de colaboración público-privada de éxito, en el que cámaras de comercio, empresas y Administración Pública trabajan conjuntamente por el interés general de la sociedad. Es una institución clave para la vertebración de España gracias, fundamentalmente, a la capilaridad del sistema cameral, en el que actúa como representante, coordinadora e impulsora de las 85 cámaras territoriales y de las 44 presentes en el exterior, siempre en colaboración con la Administración Pública".
Su Majestad añadió que, “como sabéis perfectamente, nos encontramos en un nuevo escenario internacional que se caracteriza por la inestabilidad y la incertidumbre, con un impacto directo en el ámbito económico y, en particular, sobre las relaciones comerciales. En estos momentos tenemos que hacer frente a numerosos desafíos: una grave crisis energética derivada de la invasión de Rusia en Ucrania, importantes cuellos de botella en las cadenas de suministro y crecientes tensiones geopolíticas. Como consecuencia, estamos viviendo un período de elevada inflación generalizada, que ha conducido a una corrección al alza de tipos de interés y a una reducción del consumo y de la inversión. Todo esto está provocando que el comercio internacional tenga, en estos tiempos convulsos, el viento en contra".
“A pesar de todo ello, como ya se puso de manifiesto en años anteriores -y en crisis ya pasadas- en los que, por ejemplo, hemos tenido que hacer frente a una grave pandemia en todo el mundo, el sector exportador español ha demostrado una gran capacidad de resistencia y presenta ahora un considerable dinamismo. Lo cual nos hace confiar en que, de nuevo, va a ser uno de los motores fundamentales de la recuperación de nuestra economía”, dijo el Rey.
“Y este sector exportador español lo representáis vosotros -sois vosotros-, las empresas. Empresarios que un día tuvisteis la determinación de buscar nuevos mercados en el exterior haciendo frente a la incertidumbre", agregó.
Y finalizó "a vosotros, empresarios y emprendedores, acostumbrados como estáis a asumir riesgos y a gestionar los recursos disponibles de la mejor manera posible, os animo a seguir trabajando en esta misma línea por el bien de nuestra sociedad. Vuestra actitud está siendo determinante para la recuperación de la economía española. Durante estos 3 últimos años habéis demostrado una evidente —y admirable— capacidad de adaptación y ahora tenéis que estar preparados para una nueva transformación ante los cambios acelerados que estamos viviendo".
Don Felipe afirmó también que “en este sentido, el trabajo de la Cámara de Comercio de España desde su creación ha sido de enorme valor para el tejido empresarial, particularmente para las PYMES. En estos 8 años, se ha ayudado a cerca de un millón de pymes a mejorar su competitividad a través de actividades de la Cámara, como son la formación y digitalización, y a iniciarse en su proyección internacional".
Entre las misiones de la Cámara de España destacan: La defensa de los intereses generales del comercio, la industria, los servicios y la navegación; La representación nacional e internacional de las cámaras y la coordinación de la red; La prestación de servicios a las empresas que ejerzan alguna de esas actividades; El apoyo, en particular, a las pymes para impulsar su internacionalización y competitividad; El asesoramiento al Gobierno, como órgano consultivo de la Administración; y la mediación y el arbitraje mercantil nacional e internacional.