Queridos compatriotas,
Lo primero que quiero deciros es, ¡gracias por acompañarnos hoy! Porque la Reina y yo queremos que sepáis que este encuentro tiene para nosotros una significación muy especial en este primer viaje de Estado a Portugal. Compartir con vosotros estos momentos nos alegra, nos ayuda y nos permite transmitiros, como españoles que vivís fuera de vuestra patria –aunque, ciertamente muy cerca−, el afecto y el reconocimiento por vuestra labor de haceros a la vida en Portugal y de contribuir a la realidad de nuestras magníficas relaciones como países vecinos y hermanos ibéricos.
Como bien sabéis, son bastante frecuentes las oportunidades que he tenido - de niño, después sólo o con la reina cuando éramos príncipes - de visitar Portugal, país por el que siento un gran aprecio y con el que mi familia ha tenido y tiene una estrecha relación desde hace muchos años.
Hace cuatro años y medio tuvimos el honor de reunirnos en este mismo Palacio de Palhava con muchos de vosotros; y ahora, con esta primera visita de Estado como Reyes −gracias a invitación del Presidente de la República Portuguesa−, queremos contribuir a que los vínculos de amistad y cooperación entre ambos países sean todavía mayores.
Así pues, quiero transmitiros nuestra gratitud, nuestra admiración y nuestro cariño hacia todos aquellos que desde hace decenios se han trasladado de España a Portugal buscando y encontrando en este bello país un lugar en el que establecerse. Ellos y vosotros habéis contribuido a crear estrechos lazos de afecto y amistad con Portugal. Los españoles que habéis encontrado aquí vuestro hogar sois puente de unión entre nuestras dos sociedades, contribuís al enriquecimiento, a la diversidad y al mejor entendimiento entre Portugal y España.
La última ocasión en que me dirigí a vosotros en este mismo lugar ambos países atravesábamos una difícil situación económica. Creo que seguir trabajando en la profundización de nuestros intercambios económicos, comerciales, culturales y educativos, constituye la mejor manera para contribuir a la consolidación de la recuperación, a la creación de empleo y a la sostenibilidad del modelo social que compartimos.
"...quiero transmitiros nuestra gratitud, nuestra admiración y nuestro cariño hacia todos aquellos que desde hace decenios se han trasladado de España a Portugal buscando y encontrando en este bello país un lugar en el que establecerse. Ellos y vosotros habéis contribuido a crear estrechos lazos de afecto y amistad con Portugal. Los españoles que habéis encontrado aquí vuestro hogar sois puente de unión entre nuestras dos sociedades, contribuís al enriquecimiento, a la diversidad y al mejor entendimiento entre Portugal y España..."
Antes de concluir mis palabras permitidme que haga mención a las instituciones que vertebran y articulan la comunidad española en Lisboa.
En el ámbito educativo y cultural, tanto el instituto español “Giner de los Ríos”, como el Instituto Cervantes continúan siendo instituciones de prestigiosa tradición, prueba del interés que la lengua y cultura españolas suscitan en Portugal.
En el ámbito social, me alegra contar con la presencia de los representantes de la Sociedad Española de Beneficencia, del Centro Gallego, de la Casa de España, y de la Red de Sanitarios Españoles en Portugal creada por un grupo de médicos españoles para complementar el sistema nacional de salud portugués.
En el ámbito económico, la Cámara de Comercio e Industria Luso-Española desempeña una importantísima labor en la promoción y desarrollo de las relaciones económicas y comerciales entre Portugal y España, y es una plataforma esencial en el entramado de conexiones. Recuerdo también a la Asociación de Mujeres Profesionales Españolas en Lisboa, que ayuda a las recién llegadas a integrarse en el mundo laboral y mantiene el vínculo y la cohesión entre ellas.
Asimismo, me gustaría trasladar todo mi afecto a los empresarios, trabajadores, profesores, científicos, estudiantes, deportistas y compañeros miembros de las Fuerzas Armadas y de Seguridad del Estado destinados en Portugal. Y por supuesto también a todos los portugueses y portuguesas que han unido su destino con nuestros compatriotas.
Y acabo mis palabras transmitiéndoos el reconocimiento de toda la sociedad española, y el de la Corona por el esfuerzo que realizáis día a día, y todo el afecto de la Reina y mío hacia todos vosotros.
Muchas gracias.