Es una gran satisfacción para mí acompañarles hoy en la inauguración de este Encuentro Empresarial España–Perú, que organiza la Secretaría de Estado de Comercio/ICEX España Exportación e Inversiones, en colaboración con sus dos grandes socios estratégicos la CEOE y la Cámara de Comercio de España. Un foro que busca promover de forma activa mayores intercambios y proyectos comunes −y estrechar los lazos ya existentes− entre las empresas de nuestros dos países. Agradecemos también la valiosa colaboración del Ministerio de Comercio y Turismo del Perú en la organización de esta actividad.
Este encuentro empresarial desarrollado en el marco de la Visita de Estado que estamos realizando la Reina y yo al Perú, gracias a la invitación del Presidente de la República, refleja, sin duda, la pujanza de nuestras relaciones económicas y comerciales bilaterales.
Ambos países somos socios privilegiados en una relación mutuamente beneficiosa que abarca tanto lo económico como lo político. Se trata de una relación proyectada en un horizonte temporal muy amplio, que abarca y trasciende, por ello, los distintos ciclos económicos de uno y otro país.
Durante los últimos años, hemos sido testigos de los grandes avances logrados por la economía peruana en términos de crecimiento, empleo, estabilidad macroeconómica y bienestar social. Paralelamente, el Perú ha consolidado su posición como una de las economías más dinámicas y abiertas hacia el exterior dentro del contexto iberoamericano. Hoy, el país está preparado para aprovechar plenamente las oportunidades que ofrece la globalización y para enfrentarse con garantías a los desafíos que plantea.
Indudablemente, las empresas españolas han desempeñado un papel destacado en la transformación económica que ha vivido el Perú en todos los órdenes. El hecho de que España sea el primer inversor en el país se ha traducido también en la presencia de numerosas empresas españolas (más de 400) que operan en territorio peruano.
Sus actividades se caracterizan fundamentalmente por una diversidad sectorial y de tamaño, con grandes multinacionales y PYMEs, localizadas en la mayor parte de los sectores clave de la economía como las infraestructuras, la energía, el agua, las tecnologías de la información y la comunicación (TICs), los servicios financieros o los servicios de ingeniería. En estos sectores, las empresas españolas son internacionalmente punteras y demuestran día a día su gran capacidad para construir y producir con altos niveles de calidad y en tiempo.
"...Perú y España se encuentran hoy entre las economías que registran las mayores tasas de crecimiento en sus respectivas zonas de influencia: Latinoamérica y la Unión Europea. Esta situación favorable se explica fundamentalmente por el hecho de que ambos países han alcanzado en los últimos años un elevado grado de estabilidad macroeconómica, llamada a mantenerse en el tiempo. Gracias a ello, tanto el Perú como España ofrecen a las empresas de nuestros países mercados dinámicos y sumamente atractivos para sus inversiones y actividades comerciales..."
De esta manera, la empresa española, con su compromiso de permanencia, ha podido contribuir positivamente a la modernización y prosperidad de Perú a través de la creación de empleo, la generación de mayor actividad económica, la transferencia de tecnología y conocimiento, y el mantenimiento de elevados niveles de responsabilidad social corporativa. A su vez, las empresas peruanas han encontrado en el mercado español un importante destino de sus exportaciones hacia Europa, las cuales están llamadas a expandirse a medio plazo, teniendo en cuenta el entorno tan beneficioso creado a raíz de la firma en 2013 del Tratado de Libre Comercio entre el Perú y la Unión Europea.
Perú y España se encuentran hoy entre las economías que registran las mayores tasas de crecimiento en sus respectivas zonas de influencia: Latinoamérica y la Unión Europea. Esta situación favorable se explica fundamentalmente por el hecho de que ambos países han alcanzado en los últimos años un elevado grado de estabilidad macroeconómica, llamada a mantenerse en el tiempo. Gracias a ello, tanto el Perú como España ofrecen a las empresas de nuestros países mercados dinámicos y sumamente atractivos para sus inversiones y actividades comerciales.
Por otra parte, las experiencias del Perú y España proporcionan buenos ejemplos de los efectos positivos que tienen las políticas activas de fomento de la internacionalización de las empresas, para conseguir acceder a nuevos mercados y consolidar las bases empresariales exportadoras nacionales.
El trabajo llevado a cabo por la Administración peruana está dando frutos muy prometedores en forma de incrementos notables de las exportaciones y de su creciente diversificación. En el caso español, la Estrategia de Internacionalización de la Economía Española 2017-2027 permite articular eficazmente los esfuerzos que realizan los agentes públicos para facilitar la dinámica presencia de nuestras empresas en el exterior.
Señoras y señores,
En estos últimos años, Perú ha asumido el reto de ser uno de los miembros fundadores de la Alianza del Pacífico, un proyecto de integración pragmático, realista y de gran ambición, en el que España es país observador. Se abren así expectativas ilusionantes para la economía peruana que marcarán su futuro. Estamos convencidos de que, en esta nueva etapa, las empresas españolas continuarán afianzando su fuerte compromiso con la sociedad peruana y harán aportaciones importantes a la competitividad internacional del país.
Finalmente, estamos hoy todos aquí -lugar de encuentro, identificación y compenetración de las empresas de ambas partes- como razón de ser para continuar destacando y valorando la importancia de que juntos somos más y mejores, de que la colaboración y la cooperación entre ambos no pueden sino hacernos más grandes.
Aprovechemos, pues, el marco de este encuentro empresarial para sumar nuevos resultados positivos en tantos ámbitos de nuestras relaciones bilaterales y para seguir avanzando decididamente hacia el objetivo de alcanzar el potencial que corresponde a los grados de complementariedad, intereses comunes, afinidad y amistad que existen entre nuestros dos países.
Os deseo un trabajo muy fructífero durante este encuentro, para que lo podamos recordar como otro gran hito de nuestro camino compartido hacia un mejor futuro.
Muchas gracias.