Buenas tardes, Boas tardes,
Permitidme que comience con un sentido mensaje de apoyo a todos los directivos y ejecutivos que se han visto afectados, de manera directa o indirecta, por la DANA, que tan terribles consecuencias ha tenido en la Comunidad Valenciana, en Castilla-La Mancha y en Andalucía. Quiero también agradecer toda la ayuda que, desde el ámbito empresarial, se está brindando en estos momentos tan difíciles a los afectados. La reconstrucción será un proceso prolongado que requerirá esfuerzos sostenidos en múltiples ámbitos: para recuperar formas de vida y sustento, para restablecer el tejido económico y productivo, y para dinamizar e ilusionar la vida colectiva de muchas poblaciones tan golpeadas.
Señoras y señores,
É un pracer voltar a Galicia e facelo para acompañarvos na clausura do voso Congreso anual que este ano cumpre vinte e tres edicións. Cómo pasa o tempo dende a primeira vez que estiven con vos, como Príncipe de Asturias . Son moitos anos xa que me permiten ser testemuña da evolución deste foro.
Quiero felicitaros sinceramente por el camino firme que habéis transitado, sentando con esfuerzo y visión compartida unas bases sólidas que os permiten responder mejor a los desafíos del presente y abordar el futuro desde una perspectiva común.
Este Congreso, que habéis conseguido convertir en un espacio de encuentro para directivos de toda España -lo cual tiene un grandísimo valor-, refleja vuestra capacidad para unir talento, ideas y liderazgo; consolidando, así, un proyecto integrador que sigue creciendo y que aporta confianza y conciencia de propósito y de valores compartidos a esta parte tan cualificada y determinante que representáis de nuestra sociedad para el éxito del conjunto de España.
Este año abordáis precisamente como proyectar con garantías y confianza el intangible más característico y preciado de vuestra condición, el liderazgo, en tiempos de la innovación tecnológica -potencial y ya efectivamente- más disruptiva que podemos imaginar, la Inteligencia Artificial.
Ya el año pasado avanzasteis por este camino y será sin duda un tema permanente y crucial para casi todo en el futuro: cómo administrar adecuadamente el valor de la dirección estratégica y, sobre todo, adaptativa, en un entorno de vertiginosa evolución tecnológica marcado tan profundamente por la Inteligencia Artificial .
Este contexto invita a estar muy alerta y a reflexionar sobre cómo aprovechar bien y a tiempo la Inteligencia Artificial como herramienta estratégica. Pero también sobre la inevitable gestión del cambio en la propia organización y cómo fomentar el uso responsable de las tecnologías que conlleva.
Esta reflexión es esencial porque, en primer lugar, vosotros, como directivos, debéis llevar a cabo una integración efectiva de la Inteligencia Artificial en vuestras empresas. Esto implica identificar áreas donde estas tecnologías permitan optimizar procesos, mejorar la toma de decisiones y fomentar la innovación constante evitando indigestiones.
Pero va mucho más allá de algo puramente técnico. Porque vuestro papel es garantizar que la Inteligencia Artificial sea también un componente estratégico: para sobrevivir, claro, y para seguir compitiendo en el nuevo entorno cada vez más inestable y cambiante.
"...Este Congreso, que habéis conseguido convertir en un espacio de encuentro para directivos de toda España -lo cual tiene un grandísimo valor-, refleja vuestra capacidad para unir talento, ideas y liderazgo; consolidando, así, un proyecto integrador que sigue creciendo y que aporta confianza y conciencia de propósito y de valores compartidos a esta parte tan cualificada y determinante que representáis de nuestra sociedad para el éxito del conjunto de España..."
En segundo lugar, porque la aplicación efectiva de la Inteligencia Artificial requiere que seáis nuevamente auténticos gestores del cambio. Y aquí es donde resulta indispensable vuestra mentalidad de aprendizaje continuo. Porque vuestras empresas deben evolucionar a una velocidad similar a la de toda tecnología emergente, algo no exento de complejidad. Esta evolución significa transformar estructuras y promover la capacitación del talento humano que, como soléis decir con toda la razón, es el principal activo de vuestras compañías. “Primero, las personas. Y luego, lo demás” es algo que escuchamos en el Congreso del año pasado.
Y, por último, como líderes de vuestras respectivas empresas, debéis velar por el uso responsable de estas tecnologías. Solo así se podrá mantener la confianza de empleados, clientes y proveedores. Hablamos de la necesidad un liderazgo empresarial ético.
Acabamos de escuchar hace un momento el diálogo “Los directivos frente al reto de la Inteligencia Artificial ”. No son pocos los desafíos que tenéis por delante. Siguiendo la reflexión a la que me refería: pues nada menos que guiar a vuestras empresas en esta integración tecnológica, lograr un equilibrio entre la reorganización empresarial y la innovación y velar por la responsabilidad de vuestras compañías.
No hay duda de que la Inteligencia Artificial obliga a nuevos liderazgos. Tampoco de que exige una evolución normativa paralela.
Fue en 2018 cuando la Unión Europea comenzó a adoptar un planteamiento coordinado para aprovechar al máximo las oportunidades de la Inteligencia Artificial . Ese compromiso inicial ha permitido una evolución muy positiva desde entonces llegando a materializarse en la actualidad en la creación de la Oficina Europea de Inteligencia Artificial y en el Reglamento Europeo de Inteligencia Artificial , que entró en vigor el pasado agosto. Esta evolución y adaptación del marco normativo es necesaria para garantizar la seguridad jurídica en el seno de la Unión, para fomentar la confianza entre las empresas y hacia los consumidores y para algo ciertamente primordial como es asegurar la competitividad de la Unión Europea en un mercado global.
Señoras y señores,
El conjunto de la economía europea, y la española en particular, está experimentando una transformación estructural sin precedentes hacia un futuro más digital, sostenible y ecológico, que ofrece nuevas oportunidades de desarrollo a la economía y a las empresas europeas y españolas. Mirémoslo con esperanza, pero confiando en que hagamos los deberes.
Si se tiene en cuenta el período 2018-2023, España es el cuarto país del mundo receptor de nuevos proyectos de inversión. En sectores concretos, es el tercero que más proyectos recibe en actividades de I+D, el sexto en proyectos de Inteligencia Artificial y sector TIC, el septimo en proyectos de robótica y el decimo en automoción. Estas cifras y tendencias son un indicio de que la economía española se encuentra en plena transición hacia un modelo productivo más competitivo y sostenible.
Además, a estos datos hay que añadir que España destaca en términos de conectividad, con una cobertura muy superior a la media europea en redes fijas de alta capacidad y de 5G. La dimensión empresarial también sitúa a nuestro país en una buena posición. Esto es así por el nivel de digitalización de las pymes, que está por encima de la media de la Unión Europea, y también por el dinamismo con el que las empresas españolas han integrado la Inteligencia Artificial en sus procesos. El 9% de ellas adoptó, el año pasado, soluciones de Inteligencia Artificial , lo que supera ligeramente la media de la Unión Europea, del 8%. Es cierto que debemos seguir avanzando para aumentar la competitividad, pero los pasos que están dando son muy positivos.
Queridos directivos y ejecutivos,
En un mundo en constante cambio, es fundamental permanecer abiertos a las nuevas ideas y aplicaciones como las que facilita la Inteligencia Artificial y desarrollar la flexibilidad necesaria para, incluso si es preciso, desaprender lo conocido para aprender las formas y herramientas que marcarán el futuro. Habéis demostrado en numerosas ocasiones esa apertura y capacidad de adaptación, así que no dudo de que lo seguiréis haciendo.
Muchas gracias por vuestro esfuerzo y compromiso en un momento en el que el éxito empresarial debe ir ligado, más que nunca, al progreso social.
Moitas grazas. Declaro clausurado este XXIIIº Congreso de CEDE: “Liderazgo en tiempos de Inteligencia Artificial”.