on Felipe y Doña Letizia viajaron a Portugal, acompañados por el ministro de Asuntos Exteriores y de Cooperación, José Manuel García-Margallo, y la directora general de Relaciones Bilaterales con Países de la Unión Europea, Países Candidatos y Países del Espacio Económico Europeo, María Victoria Morera. A su llegada al aeropuerto militar Figo Maduro, fueron recibidos por el embajador de España en Portugal, Eduardo Junco, y el embajador de Portugal en España, Jose Tadeu da Costa.
Seguidamente, se trasladaron al Palacio Nacional de Belém, donde se reunieron con el Presidente de Portugal, Anibal Cavaco Silva, y su esposa, Maria Cavaco Silva. A su llegada se interpretaron los Himnos Nacionales y Su Majestad el Rey pasó revista a las tropas. Mientras Don Felipe mantenía un encuentro con el Presidente de Portugal, Su Majestad la Reina mantuvo un encuentro, por separado, con la Sra. Maria Cavaco Silva y la presidenta de la Asociación Nacional de Deficiencias Mentales y Raras de Portugal, Paula Costa, en la que abordaron la situación del colectivo de personas afectadas por enfermedades raras en el país vecino.
Tras la reunión, el Rey y el Presidente portugués comparecieron ante la prensa para dejar constancia del buen momento de las relaciones entre los dos países y para ratificar su compromiso de seguir por el mismo camino en el futuro. Don Felipe aseguró que ambos países tienen intereses y problemas comunes que deben ser afrontados con una "voluntad de trabajo" conjunta, gracias a la "relación tan especial, de buena vecindad, amistad y trabajo en común" que nos une.
Al mediodía, Sus Excelencias el Presidente de Portugal y su esposa ofrecieron, en el Palacio Nacional de Queluz, un almuerzo en honor de Sus Majestades los Reyes, al que también asistieron el Primer Ministro de la República Portuguesa, Pedro Passos Coelho, y la presidenta de la Asamblea de la República, Assunção Esteves, además de representantes de la sociedad, la economía y la cultura lusa.
Antes de dar comenzó el almuerzo, Su Majestad el Rey pronunció unas palabras en las que destacó que las sociedades española y portuguesa, junto a otras de nuestro entorno y de otras regiones del mundo, “han venido acusando en los últimos años el impacto de una dura crisis económica que ha provocado un inaceptable incremento del desempleo que ha afectado a millones de ciudadanos, muchos de ellos jóvenes”. “La plena superación de esta crisis y, en especial, del desafío del paro, representa uno de los principales retos colectivos de nuestros dos países que tanto los ciudadanos portugueses como los españoles están abordando con coraje, esfuerzo y sacrificio”. “Es tiempo de vencer definitivamente estos obstáculos —no tengo duda de que lo conseguiremos; y es tiempo de continuar con fuerza nuestra senda compartida de progreso”.
También Don Felipe quiso recordar en esta visita los vínculos tan fuertes de amistad y afecto mutuo que unen a la Familia Real con Portugal. “No solo por la hospitalidad que siempre recibieron en este querido país mis abuelos los Condes de Barcelona, Don Juan y Doña María con su familia ─que hoy agradezco una vez más─; sino, también, por la intensa relación que, en todo momento, han mantenido mis padres Sus Majestades los Reyes Don Juan Carlos y Doña Sofía con la nación portuguesa”, agregó.
“El tejido de vínculos de todo tipo entre Portugal y España ─tanto personales, profesionales y educativos, como empresariales, culturales, científicos y académicos─ es hoy de una densidad y una riqueza extraordinarias”. “Así lo acreditan las Cumbres anuales bilaterales, nuestra estrecha cooperación transfronteriza y las reuniones de los foros parlamentarios”, afirmó Su Majestad el Rey, señalando que “así lo prueban y ponen de relieve también los continuos contactos que desarrollan nuestras sociedades, con iniciativas como los foros de promoción de la innovación, de emprendedores y de colaboración universitaria”. “Todo ello constituye un patrimonio común, una inmejorable relación bilateral, que se nutre de un profundo conocimiento mutuo, y que, al mismo tiempo lo enriquece”, concluyó.
Por la tarde, Sus Majestades los Reyes se dirigieron al Palacio de São Bento, sede de la Asamblea de la República Portuguesa, donde mantuvieron un encuentro con su presidenta, Assunção Esteves, y con los miembros de la Asamblea. Finalizada la reunión, Don Felipe y Doña Letizia visitaron en la Sala de los Pasos Perdidos la exposición “O Nascimiento de uma Democracia”, dedicada a la Revolución de los claveles.
Posteriormente, los Reyes se trasladaron a la Residencia Oficial del Primer Ministro de la República Portuguesa, Pedro Passos Coelho, donde mantuvieron un encuentro que puso fin al Viaje Oficial de presentación a la República Portuguesa.
Este viaje a Portugal se enmarca en la gira de visitas de presentación que Sus Majestades los Reyes efectúan a los países vecinos durante el próximo mes de julio.